Con el final de la serie Breaking Bad a la vuelta de la esquina, muchos tal vez aún se pregunten qué son las metanfetaminas. Walter White era un profesor de química que, por circunstancias de la vida, terminó dedicándose a producir esta droga tan particular, cuya historia es bastante extraña e interesante.
Historia de la metanfetamina
En 1887, los científicos aislaron por primera vez la efedrina de un arbusto utilizado desde siempre por la medicina tradicional china. En 1919, se producía por primera vez la metanfetamina, combinando este compuesto químico con fósforo rojo y yodo.
Rápidamente, se dieron cuenta de que esta droga tenía un efecto supresor del apetito, mejora el humor, la energía y la concentración. Durante la Segunda Guerra Mundial, los soldados alemanes utilizaban la droga para estar más alertas, y durante la década de 1950 era parte de una píldora para adelgazar.
Como droga ilegal, la metanfetamina tiene forma de cristal de color transparente o muy claro, es un estimulante del sistema nervioso central que se suele inhalar o fumar, y menos comúnmente inyectar o consumir por vía oral.
Es muy adictiva: aumenta la dopamina en el cerebro en un nivel que es imposible de alcanzar naturalmente, por lo que para volver a sentir esa sensación placentera es necesario volver a consumir la droga.
Cocinar la metanfetamina
A diferencia de otras drogas –por ejemplo, la marihuana o la cocaína–, la metanfetamina no se extrae de un cultivo, sino que debe producirse mediante la combinación de varios ingredientes. La efedrina, los medicamentos descongestionantes o el fósforo rojo deben someterse a reacciones químicas para poder convertirse en una droga.
Se podría decir que, para hacer metanfetamina, se necesita tener conocimientos sobre química y un laboratorio adecuado para producirla. Sin embargo, en muchos casos los laboratorios caseros son bastante peligrosos, ya que se utilizan productos volátiles que pueden provocar explosiones y que dejan grandes residuos tóxicos.
La pureza es una medida de uniformidad de la composición química de la droga: los cristales de metanfetamina son transparentes, aunque en la serie Breaking Bad se habla de que la pureza máxima se alcanza cuando tienen un tono azulado, eso es solo un mito.
Por composición química, las metanfetaminas son similares a muchos medicamentos que se utilizan hoy en día para tratar la hiperactividad y el déficit atencional en niños: las anfetaminas que podemos encontrar en la Ritalina, por ejemplo, y que producen los mismo efectos que la droga ilegal.
Efectos secundarios de la metanfetamina
El uso de metanfetaminas a largo plazo tiene efectos secundarios tales como la destrucción de vasos sanguíneos, incapacidad del cuerpo para regenerar tejidos, envejecimiento de la piel, úlceras, erosión del esmalte dental y otros problemas bucales.
Sin duda alguna, la metanfetamina es una de las drogas más interesantes, no solo por su historia sino también porque se necesitan conocimientos químicos para poder producirla. ¿Qué piensas sobre el uso de las drogas?