Ubicada al norte de Italia, Génova es considerada la ciudad puerto más grande del país y una de las más visitadas. Pasar unas horas en Génova no son suficientes para conocer todo lo maravilloso que ofrece, sin embargo son suficientes para apreciar algo de su belleza y quedarse con ganas de volver.
El Puerto Antiguo, el Acuario, la Biósfera, el Palacio San Giorgio, el Museo del Mar, el Bigo y la Catedral de San Lorenzo son algunas de las razones por las que hay que visitar esta hermosa ciudad costera.
¿Cómo llegar?
Debido a que se encuentra entre las también conocidas ciudades de Turín y Milán, se puede llegar por tren en tan solo dos horas de camino.
Además, cómo lo mencionamos anteriormente, al ser Génova una ciudad puerto, hay varios cruceros que aguardan sobre la costa mientras los turistas deciden recorrerla.
También es posible llegar en avión, al aeropuerto Cristoforo Columbo (en español Cristóbal Colón) lleva ese nombre, ya que el descubridor de América, nació en dicha ciudad.
La casa natal de Cristóbal Colón
Uno de los lugares que indudablemente debe estar en el recorrido por Génova es la Casa Natal de Cristóbal Colón, no hay sensación más extraña o indescriptible que ver la casa donde nació quién para bien o para mal descubrió un continente.
Ubicada en pleno Centro histórico, permite a los turistas que la visitan, maravillarse de las angostas y empedradas calles que conducen a diversos lugares. Porque si bien hay una parte moderna, también maravillosa por cierto, hay lugares que sin hablar cuentan fantásticas historias de siglos y siglos atrás.
Porta Soprana
Y si de historia se trata, Porta Soprana es un vivo ejemplo de ello, sus paredes se mantienen en pie desde la época medieval.
Un lugar fascinante especialmente en las noches, no sólo para admirarlo, sino para intentar escuchar el violín de Nicoló Paganini, pues según quienes viven allí, aseguran que suena en este lugar, debido a la cercanía que hay con el lugar donde vivió el músico.
Nicoló Paganini, fue uno de los mejores violinistas y compositores, que nació en Génova, de quien se dice tenía un violín embrujado, debido a lo que generaba en el público, no en vano le decían el violinista del diablo.
Para quienes quieran conocer el violín que cautivó a miles, este se encuentra en el Museo de la ciudad.
¿Qué razones tienes para visitar Génova?