De todos los bellos edificios que puedes encontrar en la ciudad de Praga, sin duda habrá uno que se destacará sobre la línea del horizonte y llamará poderosamente tu atención: La Catedral de San Vito. Enteramente ubicada en el complejo Castillo de Praga, la Catedral es uno de los principales puntos turísticos de la ciudad.
El nombre completo del edificio es Catedral de San Vito, San Wenceslado y San Adalberto y es una catedral Católica Romana, donde se desempeña el Arzobispo de Praga. El edificio es la iglesia más grande e importante de República Checha y se encuentra ubicado en el centro de la ciudad capital.
La Catedral de Praga es un excelente ejemplo de arquitectura gótica y, a su vez, contiene las tumbas de varios reyes bohemios y emperadores romanos.
La Catedral es el tercer edificio religioso construido en el lugar y dedicado a San Vito. La primera iglesia en el lugar fue fundada en el año 925 por Wenceslao I, Duque de Bohemia. Hasta el siglo XI las creencias cristianas y paganas convivían en el lugar. En el 1060 el príncipe Spytihněv II decidió construir un edificio más grande e importante para denotar la importancia y el crecimiento de la nueva fe, incorporando la edificación preexistente que contenía la tumba de Wenceslao I, entonces santo patrono de los príncipes checos.
El edificio que actualmente conocemos como la Catedral de Praga fue fundado el 21 de noviembre de 1344 con la creación del Arzobispado. Su construcción demoró más de un siglos y fue tarea de 3 generaciones. Como si fuera poco, un incendio en 1541 la dañó considerablemente. No fue sino hasta el siglo XX que el edificio fue completado, tanto su lado oeste como las dos torres.
Luego de atravesar el Portal Dorado, sobre la entrada sur de la Catedral encontrarás el Mosaico del Último Juicio, una obra de arte que data de la década de 1370 creada con un millón de piezas de vidrio y piedra. Una vez adentro, en la plaza de la Capilla de San Wenceslao, contiene su tumba y sus reliquias sagradas. En la esquina sudoeste de la capilla se encuentra la Cámara de la Corona, con las joyas de la Corona Bohemia, protegida por 7 candados cuyas llaves poseen 7 diferentes personas.
En la Cripta Real se conservan los restos de miembros de la familia real. Si desciendes las escaleras podrás observar partes pertenecientes a los primeros edificios religiosos construidos en el lugar. Finalmente, en la Capilla Wallenstein se conservan los restos de Mathias d´Arras y Peter Parles, quienes llevaron adelante la construcción del edificio moderno.
La Catedral de Praga es, sin duda, un edificio maravilloso en cuya visita podrás transportarte al pasado y admirarte del desarrollo artístico en República Checa.