Cuando crees que has tenido las mejores vacaciones de tu vida, puede parecer casi imposible emprender el regreso a casa con buen ánimo.
El síndrome post-vacacional que suele atacarnos a todas, nos hace creer que jamás podremos volver a la rutina. Pero aunque no lo creas, el regreso también tiene su lado bueno, y hay muchas maneras de disfrutarlo que tal vez nunca habías pensado.

#1 Siempre hay que volver para volver a irse
Seguramente este viaje despertó en ti más ganas de conocer el mundo de las que tenías al momento de tu partida, pero para poder seguir adelante con tus planes a futuro de conocer más destinos, es necesario que regreses a casa, y así poder planear tu próximo viaje. Por lo tanto, debes alegrarte, que estés de vuelta simplemente significa que comenzó la cuenta regresiva para tu próxima odisea.

#2 Compras
Es probable que hayas comprado muchas cosas que podrán hacerte sentir que aún sigues de viaje. Desde souvenirs que automáticamente te transportarán a su origen, hasta esas prendas invernales que no resististe comprar porque estaban de rebaja pero que el calor te quitó las ganas de usar.
#3 Tu hogar, tus reglas, tu cama
Si bien cuando estamos de viaje todo nos deslumbra y todo hace parecer nuestro hogar más defectuoso, debemos admitir que siempre echamos de menos algún objeto. Cuando te reencuentras con tus sábanas estampadas que adoras, o aquella almohada comodísima en la que tanto invertiste, recuerdas lo mucho que te hicieron falta y lo bien que te hacen sentir.
#4 Oportunidad de renovar tu rutina
Por muy duro que suene el reto de enfrentar la rutina una vez más, puedes pensarlo como una chance de probar cosas nuevas. Comenzar ese curso que tanto vienes postergando, o decidir que has juntado energías suficientes para anotarte en esa clase de Crossfit de una vez por todas. Seguro te sentirás renovada y estarás orgullosa de ti misma por haberlo logrado.
#5 Esta aventura recién comienza
Puede que en este momento pienses que no conocerás otro lugar mejor, pero no olvides que el mundo es muy grande y posee magníficos destinos esperando por ti. No debes desanimarte, aun eres joven y queda mucho por recorrer.
#6 Revivir tu experiencia
A pesar de que hayas regresado, todavía no puedes sacarte de la cabeza la cantidad de momentos increíbles que viviste y lugares paradisíacos que conociste. No tienes por qué dejar de pensar en eso, puedes compartir tu fabulosa experiencia con tus amigas y por qué no planificar una excursión todas juntas.
#7 Aquí sí te echaron de menos
Puede que te hayas encontrado tan divertida y distraída durante este tiempo que confieses que no has echado de menos a nadie más que a tu cama. Sin embargo, varios aquí se alegrarán de que estés de vuelta, en particular tu mascota sin dudas te dará una fenomenal bienvenida cuando vea que has regresado, y tal vez te hará sentir tan culpable que jamás querrás dejarlo sólo otra vez.
De ahora en más, en lugar de desanimarte cuando llegue el momento de retornar a casa, debes recordar todas estas buenas razones que seguro te darán fuerza y energía para retomar tus actividades de la mejor manera!
Vea también: Beneficios de un viaje para ti sola