Con esta historia, Raúl Brindis nos invita a ser capaces de distinguir qué tipo de emociones alimentamos y así ser dueños del curso de nuestras vidas.

Este es el décimo caso es tres días. El conductor del bus escolar fue quien encontró al niño y todavía se está buscando a quien lo atropello.

Con esta historia, Raúl Brindis nos recuerda la importancia de ayudar a quien lo necesita.

Raúl Brindis nos recuerda la importancia de mostrarnos con nuestros aciertos y errores, para así construir relaciones basadas en la aceptación.

Con esta historia, Raúl Brindis nos recuerda el valor de ayudar a los más necesitados.

Raúl Brindis nos recuerda que la decisión de disfrutar nuestros días es solo de nosotros mismos.