Madre llegó a su gran final: la muerte de Cengiz abrió la puerta de la felicidad para Zeynep y Turna

Zeynep y Turna recorrieron un espinoso camino desde que decidieron unir sus corazones. El peso del dolor en ocasiones mantuvo en peligro el amor, pero su firmeza no las apartó. Pese a la constante sombra de Cengiz y Şule, ellas lograron cruzar el laberinto del sufrimiento para formar una familia. ¿Cómo lo lograron? ¿Cómo murió Cengiz? Entérate a continuación en los momentos que marcaron el capítulo final de Madre por Univision.

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La muerte de Cengiz en Madre, ¿quién lo asesinó?

Si la rabia tuviera rostro, Cengiz sería su dueño. Si en su alma el rencor habitaba todos los rincones, la furia lo llevó al extremo. Después de fracasar al intentar cobrar la herencia de Turna, regresó a casa con los ojos hirvientes. Sabedor de que estaba solo con la pequeña, comenzó a insultarla asegurándole que Zeynep le había arrebatado su fortuna.

Cansada de las ofensas, Turna alzó la voz con valentía: "¡Ya basta! Basta, todo es por tu culpa. Yo no quise el dinero de mi abuela, lo devolví". Sin un reflejo de miedo siguió con su defensa: "Pensé que me desharía de ti si no había dinero". Sus gritos agudizaron el enojo de su padrastro y comenzó a correr para no ser lastimada. Lamentablemente, su carrera no la salvaría.

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Más tarde Şule la encontraría callada y en el suelo. Cobardemente él explicó que se había golpeado al caerse. Pero todo empeoró rápidamente. La niña se desmayó después de vomitar y su cuerpo quedó sobre el piso. Desesperada, Şule llamó a Zeynep, quien corrió en su auxilio.

Ya en el hospital los médicos les informaron que el estado de la pequeña no era alarmante. Mientras esperaban noticias, Şule le confió a Zeynep que cometió un error al pensar que Cengiz no perseguía la herencia de su hija y que no lo perdonaría. Como nunca había sucedido, ambas se tomaron de las manos como signo de solidaridad.

Al mismo tiempo, Gönül se apresuró a presentarse en la clínica para escuchar el cariñoso "Señora torpe" de su nieta. Con la sospecha de que Cengiz había sido el autor de la canallada, Şule no quiso confirmarlo, pero su mirada abría un amplio trecho de certezas.

Fue la propia Turna quien confesó la fechoría de su padrastro, aunque no quiso darle importancia. Esa revelación causaría un revuelo prontamente, pues llegó a oídos de Gönül. Después de despedirse de Zeynep y Turna se dirigió a su casa determinada a dar un paso crucial.

Por su parte, Şule también había hecho una elección: apartarse de su cruel pareja. Al notificárselo, Cengiz amenazó con golpearla y la derribó. Un pestañeo después Gönül cruzó la puerta del hogar con pistola en mano ordenándole al villano que se apartara de su esposa. "No pudimos convertirte en un hombre decente, tuviste la oportunidad y no la tomaste", le habló firmemente.

Sin embargo, una distracción permitió que Cengiz la desarmara y que el arma llegara a los pies de Şule, quien la tomó entre sus nerviosas manos. Así, él exigió a gritos que la asesinara: "Reviéntale la cabeza, si no lo haces te daré una paliza. ¡Apúntale y jala el gatillo!".

Cuando Şule estiró el brazo con la mira hacia la mamá de Zeynep, lentamente su mano giró hacia el cuerpo de Cengiz. "No lo hagas" le suplicó Gönül. Una cínica sonrisa se dibujó en Cengiz al tiempo que pronunció su última palabra: "Şule". Ella detonó la pistola para asesinar a Cengiz. El cuerpo se desvaneció poco a poco y el aliento lo abandonó para darle paso a un cadáver.

La valiosa y última decisión de Şule en Madre

Antes de que su hogar se convirtiera en escena de un crimen, Şule tomó entre sus manos dos significativos documentos. Esos papeles dictaban el futuro de Turna y Hassan, pues se trataban de la renuncia legal de sus custodias que el propio Cengiz había firmado.

Luego de meditarlo, decidió no darle más vueltas a su mente y los firmó para guardarlos en su bolsa de mano. Una vez que la policía la había arrestado por el asesinato de su esposo, le suplicó al detective que le permitiera recuperar el sobre.

"La vida de mis hijos dependen de él", les rogó a las autoridades. Hablándole con el corazón al agente y viendo desde lejos a Gönül explicó: "¿Puede darle esto a Zeynep Güneş, por favor? Esto es por mis hijos, se lo ruego". Aceptada la petición, subió a la patrulla que la llevaría a su nueva realidad no sin antes lanzar una mirada al cielo y cerrar sus ojos.

Zeynep y Turna, como la familia por la que tanto lucharon

La playa y el mar se convirtieron en el escenario de la felicidad. Acompañadas de Duru, Gamze, Ali, la abuela Zeynep y el pequeño Hassan, Zeynep, Turna y Gönül alcanzaron la alegría que tanto persiguieron.

"Somos una gran familia. Soy Turna Güneş, la hija de Zeynep Güneş, lo que más quiero en la vida", pronunció la pequeña para después darse un amoroso abrazo con su abuela y madre, y cerrar con broche de oro el capítulo final de la novela turca.