Los de Bremen hicieron respetar su casa ante un rival que, por momentos, fue demasiado inofensivo. Los goles de Klaassen al 35 y Eggestein al 86 sentenciaron el marcador.
Los de Bremen hicieron respetar su casa ante un rival que, por momentos, fue demasiado inofensivo. Los goles de Klaassen al 35 y Eggestein al 86 sentenciaron el marcador.