En entrevista desde Miami, la especialista en tour management aseguró: “Ninguna tecnología reemplazará a la intuición”. Aunque hoy existen herramientas capaces de predecir retrasos, optimizar rutas y proyectar impactos económicos o ambientales de un tour, para Burkhardt lo esencial sigue siendo sentir el pulso del artista y del público. “Puedes tener todos los datos del mundo, pero si no sientes esa conexión, no puedes dirigir una gira”, afirmó.
Violeta Burkhardt, la mente maestra detrás de las giras de Sting, Shakira y Christina Aguilera
Por décadas, Violeta Burkhardt ha sido una figura clave detrás de algunas de las giras más icónicas de la música internacional. De Sting a Backstreet Boys, pasando por Christina Aguilera, Shakira y Carlos Santana, Burkhardt ha coordinado tours que cruzan continentes, combinando precisión logística con sensibilidad artística.

Su experiencia va más allá del escenario: también ha trabajado en hospitalidad de lujo para personalidades como Bill Clinton, Ricky Martin, Angelina Jolie y Kimi Räikkönen, entre otros, en hoteles como Hilton y The Ritz-Carlton. Esta combinación de arte, gestión y atención personalizada es lo que le permite liderar operaciones complejas con éxito.
Cuando comenzó su carrera, los smartphones no existían, los artistas se comunicaban por radioteléfonos y los itinerarios se imprimían en hojas que fácilmente se perdían entre maletas. Treinta años después, Burkhardt observa cómo el tour management se ha transformado en un organismo vivo, donde la tecnología potencia pero no sustituye la intuición humana.
“Antes, lo más importante era anticipar los imprevistos; ahora es interpretar los datos”, recuerda. Con la inteligencia artificial y el análisis predictivo, el tour manager moderno combina habilidades digitales con sensibilidad emocional: “Es alguien que traduce emociones en decisiones operativas. Que sabe cuándo acelerar o reducir la presión. Que puede mirar una tabla de Excel y ver una historia humana detrás”.
Para Burkhardt, el arte de llevar una banda por el mundo sigue siendo, sobre todo, humano. “El público ve luces, sonido y perfección. Pero detrás de eso hay cientos de microdecisiones tomadas bajo presión. Esa sincronía invisible es lo que hace que una gira funcione”, explica.
Hoy, además de asesorar y capacitar a nuevas generaciones, Burkhardt continúa innovando en la industria del entretenimiento, compartiendo sus conocimientos sobre tour management, producción internacional y operaciones de gran escala. Su legado demuestra que, incluso en la era digital, la sensibilidad y la intuición son insustituibles.










