HOUSTON, Texas- La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) abrió una investigación sobre el accidente del avión Beech King Air 350i de la Marina de México que se precipitó el lunes 22 de diciembre en la bahía de Galveston, Texas.
Inicia investigación federal tras el desplome de una aeronave de la Marina de México en Galveston, Texas
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos abrió una investigación sobre el accidente de un avión de la Marina mexicana que cayó en la bahía de Galveston, Texas, y dejó cinco muertos, dos heridos y una persona desaparecida.
Las labores iniciales se centrarán en recuperar los restos de la aeronave, proceso que podría tomar una semana o más. Los restos serán trasladados a una instalación segura, donde investigadores del NTSB realizarán un examen detallado del avión.
De acuerdo con la agencia estadounidense, la investigación abarcará tres áreas principales: el piloto, la aeronave y el entorno operativo.
Los especialistas recopilarán datos de vuelo, grabaciones de comunicaciones con el control de tráfico aéreo, registros de mantenimiento, y las condiciones meteorológicas y de iluminación al momento del accidente.
También se revisará la licencia, experiencia reciente y antecedentes del piloto, así como dispositivos electrónicos que pudieran contener información útil.
La comunicación con la aeronave
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, informó durante la mañana del 23 de diciembre que los controladores aéreos perdieron comunicación con la aeronave durante unos diez minutos antes del accidente y que, en un principio, se creyó que había aterrizado sin contratiempos en su destino, Galveston.
“La información inicial indicaba que el avión había llegado a su destino, pero lamentablemente se confirmó que cayó al mar”, declaró Sheinbaum.
Sobre las víctimas mortales y los heridos
Autoridades confirmaron el estado del personal y los pasajeros a bordo del avión de la Secretaría de Marina (Semar) que se estrelló recientemente en la bahía de Galveston.
De acuerdo con el reporte oficial, tres integrantes de la Marina perdieron la vida en el accidente: el teniente de fragata Víctor Rafael Pérez Hernández, el teniente de corbeta Juan Iván Zaragoza Flores y el marinero Guadalupe Flores Barranco.
Las autoridades también informaron que el teniente de fragata Luis Enrique Castillo Terrones continúa desaparecido.
Entre los pasajeros civiles, se confirmó la muerte del menor Federico Efraín Ramírez Cruz, quien viajaba como paciente, y del médico Juan Alfonso Adame González.
Por otra parte, dos personas lograron sobrevivir al impacto: Julia Aracelis Cruz Vera, que acompañaba al paciente, y la enfermera Miriam de Jesús Rosas Mancilla.
Ambas fueron rescatadas con vida por los equipos de emergencia que acudieron al lugar del accidente.










