Proponen plan para ayudar a inmigrantes
Se trata de un plan, presentado el jueves por la senadora Hillary Clinton y el legislador Mike Honda, que busca agilizar el aprendizaje del inglés y el proceso de integración de los inmigrantes que llegan a Estados Unidos.La pareja de legisladores demócratas, convencidos de que lo que se necesita es ayudar a los inmigrantes y no atacarlos, indicó en una rueda de prensa que la medida busca eliminar los obstáculos para la integración social de los extranjeros y que éstos puedan ser parte del futuro colectivo del país.La medida cuenta con un sólido apoyo del sector empresarial, de sindicatos, grupos académicos, comunidades de fe, coaliciones hispanas y diversas organizaciones de defensa de los inmigrantes."La gente no puede convertirse parte de un sistema si no lo entienden", expresó Honda, demócrata de California.El proyecto de ley, que también cuenta con el respaldo de demócratas y republicanos, quiere ayudar a entregar recursos federales a inmigrantes y sus gobiernos locales y estatales para aprender inglés."Casi 6 millones de residentes permanentes legales en este país necesitan ayuda aprendiendo ingles, y las listas para clases de inglés tienen esperas de hasta tres años", señaló Clinton, senadora de Nueva York y ex aspirante demócrata a la presidencia estadounidense.Según la Oficina Nacional del Censo, 54.8 millones de personas, o más del 19 por ciento de la población nacional hablan un idioma extranjero en casa, y entre 11 y 21 millones apenas "chapurrean" el inglés."Bueno, todo el mundo necesita hablar inglés", enfatizó Mildred Otero, de la Oficina de la Senadora Clinton. "Pero donde están los recursos para ayudar a las personas para aprender a hablar inglés y que necesitan integrarse mas a la cultura americana... ¿qué estamos haciendo para ayudarlos?".En vez de "demagogia y ataques disfrazados de debate" migratorio, el Congreso debe aprobar una medida que ayude a "cerrar la brecha entre el llegar a Estados Unidos y el integrarse al tejido del país", señaló Clinton, quien obtuvo un enorme apoyo de la comunidad hispana durante su fallida campaña electoral."El debate migratorio de los últimos años ha estado sumido en pugnas y ataques políticos y muy pocos han tenido la voluntad de dar respuesta a los asuntos prácticos e importantes que ayudarían mucho a que Estados Unidos fuese un país más fuerte y más próspero", se quejó Clinton.A parte de la barrera del idioma, los inmigrantes también afrontan problemas para navegar en el entresijo financiero de Estados Unidos, poca familiaridad con su cultura y escaso acceso a capacitación laboral, señaló la ex candidata presidencial.Para enfatizar que de la diversidad cultural surgen "mejores ideas, más energía y dinamismo" para Estados Unidos, Clinton puso como ejemplo a la ciudad de Nueva York, un innegable microcosmos de la sociedad estadounidense donde el 40 por ciento de su población nació en el exterior y se mezclan a diario unos 108 idiomas y dialectos.La senadora de Nueva York dejó en claro que preferiría que
esta medida fuese parte de una reforma migratoria integral porque la
integración debe ser parte de ese debate.
Honda recordó que son
muchos los casos en que los niños sirven de intérpretes para sus
padres, y es imperante ayudar a los inmigrantes en su integración "si
queremos permanecer como un líder eficaz" en el mundo.Según el
legislador californiano, este proyecto de ley bipartidista acelerará el
proceso de integración y ayudará a los inmigrantes a aprender el inglés
con mucha más velocidad que la que les tomó a los alemanes, italianos,
holandeses y previas generaciones.A su juicio, el aprendizaje
del inglés no está reñido con la conservación de la cultura y cada
inmigrante debe aprenderlo "sin perder su lengua materna en ese
proceso".La iniciativa invierte fondos en programas de inglés
para adultos; aumenta a $350 millones de dólares el dinero destinado a
programas de alfabetización familiar, y ofrece un incentivo tributario
de $1,500 dólares para los maestros de inglés.También propone
créditos tributarios del 20 por ciento para empresas que ofrezcan a sus
empleados programas de inglés y de bachillerato.Además
reestablece la Oficina de Ciudadanía dentro del Gobierno federal para
"coordinar políticas sobre la integración" del inmigrante, y facilita
fondos para que los sectores público y privado también pongan en marcha
programas de integración.En realidad, los congresistas y
senadores que patrocinan este proyecto reconocen que es muy difícil que
se apruebe antes de la elección de noviembre próximo. Pero la
estrategia es conseguir el suficiente apoyo para que se convierta en
una de las primeras prioridades del Congreso después de la elección.En
declaraciones a EFE, Arturo Vargas, director ejecutivo de la Asociación
Nacional de Funcionarios Latinos Electos (NALEO) reconoció que se trata
de una movida política porque, ante la apretada agenda legislativa, es
poco probable que el proyecto de ley salga en 2008."Lo que
queremos es sentar las bases para discutirla en el siguiente Congreso y
a partir del 20 de enero, con un nuevo presidente, podamos avanzar en
esta ofensiva", dijo Vargas."Los inmigrantes quieren aprender
inglés y las tonterías de gente como Lou Dobbs (presentador conservador
de CNN) de que no quieren integrarse no son ciertas. El problema es que
no hay suficientes recursos", puntualizó Vargas.Según el
activista de NALEO, "lo que sabemos es que los inmigrantes quieren
aprender inglés, pero no hay suficientes clases de inglés. Lo que este
proyecto de ley hará es ofrecer los recursos para proveer esos
servicios que son tan necesarios. Hay gente que está esperando dos y
tres años para poder entrar a una clase de ingles", puntualizó.La ley también daría fondos federales a localidades y estados para ayudar a fomentar la integración de los inmigrantes."Sería
una ayuda para todos, y los que salen ganando es todo el mundo en este
país y no nos estamos olvidando de la comunidad latina", apuntó John
Amaya, del Fondo Legal, de Defensa y Educacional México Americano,
conocido por sus siglas en inglés como MALDEF.