Nanopartículas ¿son un peligro?
Las nanopartículas, creadas a partir de la manipulación de la materia, tienen como rasgo común una muy débil masa a nivel de moléculas o átomos, que han abierto la posibilidad de crear materiales con otras propiedades químicas."La nanotecnología presenta la oportunidad de crear nuevos y mejores productos. También tiene el potencial de mejorar la evaluación, gestión y prevención de riesgos ambientales. Sin embargo, hay preguntas sin respuesta acerca del impacto de estos nanomateriales en la salud humana y el medio ambiente", afirmó en su último reporte la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés).Su peligrosidad"Cuando más se divide a la materia en trozos pequeños, más reactiva es y, por lo tanto, más peligrosa", indicó Daniel Bloch, médico laboralista en la Comisión de Energía Atómica (CEA) francesa. El principio es el mismo que "cuando uno prepara un plato de salsa con cebolla, y se la desmenuza para que tenga más gusto", explicó Bloch.Ya se ha evidenciado, al parecer, que las nanopartículas pueden provocar, en concentraciones elevadas, un estrés oxidante y por lo tanto inflamaciones.Francelyne Marano, directora del laboratorio de citofisiología y toxicología celular de la Universidad Paris dice que "la capacidad de estos nuevos materiales para pasar de los pulmones a la sangre y luego a los otros órganos sigue siendo poco conocida, pero hay preocupación".Marano recuerda que "el cruce de la barrera cutánea no se produce cuando la piel está sana, pero es posible en caso de insolación, por ejemplo".Sin embargo, Jeff Morris, Director de la Oficina de Investigación y Desarrollo del EPA, subraya que "en este punto de las investigaciones, no estamos seguros si bajo la mayoría de las condiciones las nanopartículas podrían llegar a los órganos internos y mucho menos entran en la sangre".
Actualmente estos nanomateriales son usados en productos que usas a diario, desde cremas corporales, hasta juguetes que los niños usan, como el XBOX 360.En febrero de 2008, según el Proyecto de Nanotecnología Emergente, los productos para el consumidor hechos de nanopartículas llegaban a los 606, cifra que se elevó en un 185 por ciento desde marzo de 2006 y de acuerdo a AFP, llegarán a ser dos millones de productos hacia 2015.De estos artículos, 369 son de uso personal, como cremas, ropa, bienes deportivos, algunos otros son productos para el jardín y el hogar, electrónicos, y otros tantos son alimenticios. Muchas cremas para el sol, por ejemplo, contienen nanopartículas de óxido de titanio, silicio o zinc, aunque tal vez no tengan el término 'nano' en sus etiquetas. Cremas para bebé, como las de famosas marcas Mustela o Banana Boat, así como infinidad de cremas corporales para adultos están hechas de nanopartículas y tal vez ni siquiera lo sepas. Algunos de estos materiales son también utilizados en la alimentación, como el silicio coloidal, que entra en la composición del chocolate en polvo para evitar la formación de grumos.Si quieres saber si algunos de los productos que consumes a diario están hechos de nanopartículas, puedes consultar en: http://www.nanotechproject.org./inventories/consumer/Su impactoEn la naturaleza, las nanopartículas "pueden transportar por gramo grandes cantidades de contaminantes conocidos" como el arsénico o los pesticidas, explica por su lado Jean-Yves Bottero, director del Centro Europeo de Geociencia del Medio Ambiente (CEREGE), en Aix-en-Provence (sur de Francia).Por suerte, su impacto a corto plazo se ve limitado por el hecho de que "las nanopartículas parecen ser rápidamente bloqueadas en su transferencia y se mantienen en el suelo sin alcanzar la capa freática", señala. Lo que no impide que al parecer se tenga, "a escasas dosis y a largo plazo, una alteración enmascarada del ADN (patrimonio genético)", así como efectos sobre la biodiversidad. Los profesionales que participan en la elaboración o producción de esos nuevos materiales son los más expuestos a la inhalación de esas partículas, al menos dos a tres veces inferiores a 100 nanómetros, o sea un diezmilésimo de milímetro.Jeff Morris, de la EPA, finaliza diciendo que al menos en los lugares donde las nanopartículas son producidas, agencias como el Instituto Nacional de Salud Y Seguridad (NIOSH, por sus siglas en inglés) han desarrollado mejores prácticas para su manejo para que éstas no lleguen a tener contacto con el ser humano.