Camboya aceptó al crucero Westerdam con 2,257 personas a bordo. Por temor a que hubiera casos de coronavirus en el barco, Japón, Guam, Filipinas, Taiwán y Tailandia, le cerraron sus puertos. Así, lo que iba a ser un paseo turístico teminó en pesadilla, con los viajeros literalmente varados en el mar.