Gobierno aumentará control migratorio
Michael Chertoff, secretario (ministro) del departamento de Seguridad Interna (DHS), detalló que esa cartera elabora un documento en el que se incluyen medidas para controlar eficientemente la frontera, detener a más indocumentados y proceder a deportarlos aceleradamente.
"El público estadounidense tiene razones para estar consternado por una situación en la que siente que (el gobierno federal) no tiene el control apropiado sobre nuestras fronteras", dijo el ministro durante un encuentro con periodistas.
Las declaraciones fueron emitidas días después que Bill Richardson, gobernador de Nuevo México, decretara el estado de emergencia en cuatro condados fronterizos, argumentando una "total inacción y falta de recursos" por parte del gobierno federal para controlar la frontera, y también ante la presión ejercida por rancheros y policías locales.
Una semana después de la decisión de Richardson, Janet Napolitano, gobernadora de Arizona, también decretó el estado de emergencia en algunos condados de la frontera con México y habilitó fondos especiales para luchar contra el crimen asociado con inmigrantes sin papeles.
Números peligrosos
La inseguridad fronteriza, relacionada principalmente con el narcotráfico, pero también con las pandillas y el contrabando de personas, ha dejado un saldo de al menos 550 muertos en ambos lados de la frontera en lo que va del año.
José Garza, vocero de la Patrulla Fronteriza de Arizona, dijo a Univision Online que en el curso del año fiscal 2005 "190 personas han perdido la vida en sólo en el sector de Tucson".
El año fiscal estadounidense comienza el 1 de octubre y termina el 30 de septiembre. Al término del año fiscal 2004, oficialmente se registraron 172 muertes de indocumentados en la misma zona, mientras que en el año fiscal 2003 el número de fallecidos fue de 151.
El secretario Chertoff dijo que en el sector de Tucson "estamos avanzando rápida y agresivamente para diseñar un plan integral con soluciones reales".
El martes fuentes del DHS dijeron que en noviembre se implementará un programa de vuelos de aviones no tripulados. Las aeronaves, conocidas también como aviones espías, fueron implementadas en 2004 en Arizona, pero este año serán habilitadas en Nuevo México, California y Texas.
El DHS también dijo que en los últimos 10 años el número de agentes de la Patrulla Fronteriza subió de unos 4 mil a 11 mil. El ministerio también reconoció que el número de arrestos de indocumentados en la frontera volvió a subir en los últimos dos años, poniendo en evidencia el fracaso de las políticas de control fronterizo.
Cifras no oficiales indican que al menos 700 mil personas tratan cada año de ingresar ilegalmente en Estados Unidos.
Grupos luchan por los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos advierten que las medidas adoptadas por el gobierno de Washington para cercar la frontera obligan a los inmigrantes a cruzar por zonas cada vez más peligrosas, poniendo en riesgo sus vidas.
A su vez, miles de inmigrantes que son arrestados por las autoridades en su intento por entrar al país son liberados porque no hay suficiente espacio en los centros de detención. La mayoría de estas personas recibe un citatorio para presentarse ante un juez de inmigración, pero no acuden a la audiencia.
Chertoff dijo que contempla contratar a unos mil nuevos agentes de Patrulla Fronteriza en 2006 si el Congreso lo autoriza, instalar 2.250 camas nuevas en los centros de detención, ubicar a jueces migratorios cerca de estos centros y contratar más abogados que defiendan al gobierno en las audiencias de deportación.
El acuerdo con México
En opinión de Demetrios Papademetriou, director del Instituto de Política Migratoria en Washington, la Casa Blanca en breve comunicará una serie de nuevos controles migratorios que incluye el destino de fuertes recursos económicos y humanos, y una mayor vigilancia aérea en la frontera de 3.200 kilómetros con México.
Pero en determinado momento el gobierno de Washington "tendrá que tragar saliva y sentarse a negociar seriamente con México, con el cual hemos dialogado durante 15 años pero sin darle nada de lo que necesita para cooperar de verdad: más visas y hacer algo por todos los mexicanos que están aquí ilegalmente", sostuvo.
México y Estados Unidos estuvieron a punto de alcanzar un acuerdo migratorio en septiembre 2001, el que fue suspendido tras el ataque terrorista al World Trade Center y el Edificio del Pentágono.
El fracasado plan incluía un programa de visas temporales de empleo para unos 3 millones de campesinos indocumentados y sus familiares inmediatos (cónyuges e hijos menores de edad solteros).
El proyecto derivó luego en la propuesta migratoria que el presidente George W. Bush entregó el 7 de enero de 2004, iniciativa que se encuentra estancada en el Congreso por falta de apoyo republicano y demócrata.
Además de la propuesta Bush, el Congreso tiene otros planes que también se encuentran detenidos por falta respaldo bipartidista. Esos planes son:
Propuesta McCain-Kennedy. Plan bipartidista. Recomienda crear una nueva categoría de visa que podrá ser solicitada por inmigrantes que lleven al menos 5 años en Estados Unidos, paguen impuestos y no tengan antecedentes criminales. Al recibir la visa, el trabajador pagará una multa de 2 mil dólares. Después de 5 años como residente temporal, el extranjero podrá solicitar la residencia. La familia también recibirá permiso de estadía.
Propuesta AgJobs. Cuenta con el respaldado de ambos partidos y consiste en un programa de ajuste merecido por el cual los trabajadores agrícolas indocumentados podrán solicitar, primero, la residencia temporal basada en su experiencia laboral previa, y luego convertirse en residentes permanentes una vez que cumplan los requisitos del posible empleo.
La Propuesta de Ley Dram Act. Iniciativa presentada en septiembre de 2003 y respaldada por más de 150 grupos defensores de los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos. El plan busca dar, cada año, residencia temporal a los mejores estudiantes indocumentados de secundaria. Una vez que se gradúen de la universidad, cumplan una determinada cantidad de horas comunitarias y demuestren buen carácter moral, podrán pedir la residencia permanente. El plan beneficiaría a 65 mil estudiantes cada año.
Proyecto SOLVE. Presentado el 4 de mayo un grupo de legisladores demócratas. El plan se centra en la reunificación familiar, la legalización ganada sobre la base de trabajo y la creación de un nuevo programa de trabajadores temporales. Podría beneficiar a gran parte de los 8 millones de indocumentados. Los ilegales que demuestren haber acumulado 24 meses de empleo (incluye autoempleo) y han pagado sus impuestos, tendrán derecho a una visa temporal. Después de 5 años podrán pedir la residencia permanente siempre y cuando carezcan de antecedentes penales.
Plan Cornyn-Kyl. Propuesta presentada el 20 de julio por los senadores republicanos John Cornyn (de Texas) y Jon Kyl (de Arizona). Recomienda que todos los indocumentados salgan de Estados Unidos en un plazo de 5 años y tramiten en sus países de origen una visa temporal de empleo por 2 años. Los extranjeros ilegales no serán sancionados o multados si se entregan a las autoridades. El plan también recomienda la contratación de 10 mil nuevos agentes para la patrulla fronteriza, entre otras sugerencias.
Tanto el Senado (Cámara Alta) como la Cámara de Representantes (Cámara Baja) del Congreso estadounidense no han señalado una fecha para discutir alguno de los planes migratorios en su poder.