Llenar la FAFSA y solicitar ayudas financieras a tiempo permite tener un panorama más claro a la hora de ir a la universidad

Llenar la Solicitud Gratuita de Ayuda Federal para Estudiantes ( FAFSA, por sus siglas en inglés) es el primer escalón que lleva a la mayoría de los estudiantes del país a obtener los recursos económicos que requieren para pagar sus estudios universitarios. Las aplicaciones deben hacerse o renovarse cada año, a partir del 1º de octubre, y cada alumno debe estar atento a las fechas límites de los estados y las universidades para poder aprovechar todos los recursos disponibles.
“Llenar la FAFSA es muy importante porque permite obtener la ayuda que muchos necesitan para pagar los gastos de la universidad. Lo mejor es llenarla lo más pronto posible, una vez comienzan las aplicaciones, para que el estudiante pueda recibir el máximo del dinero que le pueda corresponder”, dice Nancy Lewin, directora general del centro para la equidad en el aprendizaje de ACT.
El principal requisito para llenar la FAFSA es tener un número de seguro social y presentar la declaración de impuestos y saldos de cuentas corrientes y de ahorros de los alumnos y sus padres, en caso de ser dependiente de estos. Tomando en cuenta también otros datos socioeconómicos y los costos de ir a la universidad seleccionada se estima el paquete de ayuda financiera que recibirá cada estudiante, que puede ser principalmente una beca, un préstamo o parte del programa de estudio y trabajo. La herramienta FAFSA4caster es muy útil para hacer estimaciones en casa.
Para consultar los tiempos límites o comenzar a llenar en línea el formulario de la FAFSA consulte este enlace. También puede hacerlo en la aplicación móvil myStudentAid, actualmente disponible solo en inglés en App Store y en Google Play. Igualmente, puede completarlo en formato PDF y enviarlo por correo postal a las oficinas de FAFSA o solicitar una copia impresa en formato PDF a través de una llamada al 1-800-4-FED-AID (1-800-433-3243) o al 334-523-2691, para luego llenarlo y enviarlo por correo postal para su procesamiento.
Más ayudas disponibles
En el caso de los estudiantes DACA, aunque tienen un número de seguro social, no son elegibles para recibir ayuda federal. Tanto ellos como otros alumnos indocumentados pueden calificar para otras becas, como las que otorgan las universidades, algunos estados y empresas privadas.
“Hay muchas becas para los estudiantes que no califican para recibir la FAFSA, lo importante es buscar muy bien, porque existen algunas dependiendo de la carrera que les gustaría estudiar, si son latinos o de otras minorías…”, explica Lewin, quien sugiere consultar aquí para conocer los estados que ofrecen ayuda financiera para estudiantes DACA e indocumentados, y este otro enlace para acceder a más de ocho mil becas y ayudas financieras de acuerdo al perfil e interés del alumno.
Los beneficiarios de DACA deben consultar con sus consejeros , especialistas en admisiones u oficinas de ayuda financiera antes de completar la FAFSA, para evaluar las opciones individuales de ayuda financiera y su elegibilidad. Si bien los beneficiarios de DACA no son elegibles para recibir ayuda financiera federal, completar la FAFSA les ayuda a acceder a ayuda financiera estatal y de otro tipo.
Fechas claves para la planificación
Uno de los consejos que Lewin ofrece a los padres y a los estudiantes que están tanto en el grado once (junior) como en el doce (senior) de secundaria es que lleven un calendario, en el que apunten todas las fechas límites para solicitar ayudas financieras, pedir cartas de recomendación a los profesores, escribir los ensayos, presentar exámenes estandarizados y enviar cada una de las aplicaciones.
“Es importante que los padres sepan estas fechas por los documentos que deben darle a sus hijos, como la declaración de impuestos para llenar la FAFSA. Para los estudiantes es muy importante llevar un calendario porque es mucho lo que tienen que hacer, y esta es la mejor manera de tener un orden y que no se les pase ningún tiempo límite”, explica Lewin.
Calificación más alta para destacar
Aunque este último año, cientos de universidades del país han optado porque los exámenes estandarizados sean opcionales, algunos centros de educación superior ofrecen asistencia financiera para alumnos que obtienen puntajes competitivos en estas pruebas, por lo que tomarlas representa una ventaja.
Pensando en ellos, está de nuevo disponible el ACT Superscore, con el que los estudiantes que toman este examen más de una vez son beneficiados, pues se les toma como oficial el mejor puntaje que hayan sacado al presentar varias veces toda esta prueba o una sección de ella.
“Es muy provechoso para los alumnos, porque sabemos que al tomar este examen que es largo, muchos están cansados al final. Entonces, si en esa última sección no salieron bien o hay otra área en la que quieren mejorar la calificación, tienen la oportunidad de presentarla de nuevo. Al final le será tomado en cuenta el mejor puntaje que obtenga. Los que usan el programa de exención de pago (fee waiver) no tienen que pagar por presentar estas secciones”, explica Lewin.
Además de los resultados de este examen, Lewin asegura que un buen ensayo y las cartas de recomendación que escriban los profesores de sus alumnos son vitales para que las universidades entiendan mejor cómo es el estudiante que busca ser admitido y solicita ayuda financiera. “Todo eso hay que hacerlo con tiempo, para que estén bien escritas. Son muy importantes porque realmente con ellas las universidades saben que tipo alumnos son los que serán admitidos”, añade Lewin.
Si necesita orientación en español sobre la ayuda financiera, cómo entender el paquete de ayuda económica, cómo pagar la universidad, cómo escribir un buen ensayo y consejos para presentar el examen ACT, visite este enlace.