Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH, una casa especializada en la restauración de los modelos de la primera generación del legendario
Volkswagen Beetle con sede en la municipalidad bávara de Reichertshofen, mostró su primer modelo propio en forma conceptual, el
Memminger Roadster 2.7. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
El Roadster 2.7 utiliza un motor que, aunque cuenta con un
diseño propio de Memminger, no deja de tener raíces en la historia de Volkswagen. Se trata de un cuatro
cilindros enfriado por aire de 2.7 litros estilo boxer con pistones opuestos, del cual se podría decir que es un descendiente de gran cilindrada de los motores utilizados por los Volkswagen Tipo 4 de finales de los 60. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
La
eliminación de los asientos traseros en el Memminger Roadster 2.7, permitió la colocación del motor más hacia el centro del vehículo, lo que le da una mejor distribución de peso lo que debería darle mayor estabilidad. De hecho, el constructor lo describe como un vehículo de
motor central. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
El motor del Memminger Roadster 2.7 está acoplado a una
transmisión de 5 velocidades y desarrolla
209 caballos de fuerza y
183 lb-pie de torque, lo que combinado con su bajísimo peso de apenas 1,763 libras, lo convierte en un auto que en teoría debería ser rápido, ágil y tremendamente divertido de manejar. El fabricante estima que debería ser capaz de alcanzar 200 km/h (125 mph) sin problemas. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
Pero tanta belleza no llega sin sacrificios. Para mantener su
peso pluma, el Memminger Roadster 2.7 carece de las conveniencias que damos por sentado en los automóviles modernos, como un sistema de sonido y bolsas de aire. Ni hablar de sistemas de navegación y otros elementos de seguridad activa y pasiva. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
Con lo que el Memminger Roadster 2.7 si cuenta es con un
sistema de frenos excepcional. De el pequeño roadster utiliza los mismos frenos de cuatro discos utilizados por el Porsche 911 de primera generación. El roadster también cuenta con una
suspensión independiente reforzada y
rines de aleación ultraligera de 18 pulgadas. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
Los lectores más astutos ya se habrán dado cuenta de que el concepto del Memminger Roadster 2.7 está basado en
la misma idea que dio origen al
Porsche 356 en 1948; un auto deportivo de bajo peso basado en el Volkswagen Beetle original. Algunas cosas nunca cambian. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
Memminger supo actualizar muchos de los elementos visuales que distinguen al Volkswagen Beetle en su Roadster 2.7. Sus parachoques, muy parecidos al del viejo
Vocho, en realidad son mucho
más resistentes que los que venían instalados en el modelo original. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH
Quién hubiera pensado que el humilde Vochito se vería así de bien y de sexy, sobre todo 15 años después de que Volkswagen detuviese su producción a nivel mundial. Excelente homenaje a un
clásico de todos los tiempos. Seguiremos de cerca los desarrollos relacionados a este concepto, uno que sin duda merece ser seguido por un auto de producción. Crédito: Memminger Feine Cabrios & Stahlbau GmbH