La lucha libre extrema se ha popularizado en este país, pero sigue siendo mayormente un espectáculo alejado del circuito profesional. Incluye desde luchas callejeras fuera del ring hasta una 'Lucha Estelar Extrema' en la que seis suben al cuadrilátero a pelear con sillas, lámparas de neón, navajas y tenedores de plástico.