En un documental estrenado este miércoles en Roma, Italia, el papa Francisco pidió que se legisle en favor de las uniones civiles para parejas del mismo sexo. Ante estas declaraciones, el obispo de Arecibo, monseñor Daniel Fernández Torres, puso en entredicho las expresiones del Papa y expresó que la doctrina sobre la homosexualidad se encuentra en el Catecismo de la Iglesia Católica y en los documentos doctrinales sobre el tema.
Obispo de Arecibo responde a expresiones del papa Francisco sobre matrimonio del mismo sexo
En un documental estrenado este miércoles en Roma, Italia, el papa Francisco pidió que se legisle en favor de las uniones civiles para parejas del mismo sexo. Ante estas declaraciones, el obispo de Arecibo, monseñor Daniel Fernández Torres, indicó que no se puede cambiar la Doctrina de la Iglesia Católica ni ir en contra de ella.

Recordó que en el caso de las uniones de hecho homosexuales, la Congregación para la Doctrina de la Fe emitió bajo el pontificado de San Juan Pablo II el documento “Consideraciones acerca de los proyectos de reconocimiento legal de las uniones entre personas homosexuales”.
En este texto Magisterial, se establece: “La Iglesia enseña que el respeto hacia las personas homosexuales no puede en modo alguno llevar a la aprobación del comportamiento homosexual ni a la legalización de las uniones homosexuales”.
“El bien común exige que las leyes reconozcan, favorezcan y protejan la unión matrimonial como base de la familia, célula primaria de la sociedad. Reconocer legalmente las uniones homosexuales o equipararlas al matrimonio, significaría no solamente aprobar un comportamiento desviado y convertirlo en un modelo para la sociedad actual, sino también ofuscar valores fundamentales que pertenecen al patrimonio común de la humanidad. La Iglesia no puede dejar de defender tales valores, para el bien de los hombres y de toda la sociedad”, agrega.
Por otro lado, dijo monseñor Fernández Torres el Catecismo de la Iglesia Católica establece en el número 2357 que “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados. Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso”.
“Las supuestas declaraciones o respuesta de un Papa en una entrevista no pueden cambiar la Doctrina de la Iglesia Católica ni ir en contra de ella”, expresó el obispo de Arecibo.
Manifestó que no hará más declaraciones al respecto, sino que dejará en manos de la Santa Sede cualquier declaración o aclaración.
“La prudencia aconseja esperar, ya que no sería la primera vez que unas declaraciones del Papa son extrapoladas intencionalmente por algunos”, añadió.
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