TAMPA, Florida.- Ashley Moody, la procuradora general de Florida que ahora asume el asiento senatorial dejado por Marco Rubio, es mucho más que una figura política. Con profundas raíces en Plant City, en el condado de Hillsborough, su trayectoria refleja una mezcla de tradición local, ambición y lealtad partidista.
¿Quién es Ashley Moody? La carrera de la jueza más joven de Florida ahora en el Senado
Ashley Moody nació en Plant City, Florida, y proviene de una familia con tradición en el derecho y la política, lo que influyó en su trayectoria. Se destacó como fiscal federal y luego como jueza más joven de Florida.
Por:Univision
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Nacida en 1975, Moody creció en Plant City, una comunidad pequeña conocida como la " Capital Mundial de la Fresa de Invierno". Su familia tiene una herencia de cinco generaciones en la zona, destacándose como farmacéuticos, banqueros, jueces y políticos. Su padre, James S. Moody Jr., es juez federal, y su abuelo, James S. Moody Sr., fue legislador estatal y juez del condado de Hillsborough. Este legado moldeó sus primeros pasos.
Desde joven, Moody mostró un liderazgo innato. En la escuela secundaria, fue una estudiante destacada y líder en actividades como el consejo juvenil y el club de teatro. En 1993, su coronación como Reina del Festival de la Fresa consolidó su lugar como un símbolo local. Posteriormente, obtuvo tres títulos en la Universidad de Florida, incluyendo un grado en derecho, convirtiéndose en una "triple Gator" y miembro de Florida Blue Key, una sociedad honorífica que ha formado a líderes estatales.
Su carrera legal comenzó en la firma Holland & Knight, donde trabajó en litigios comerciales. Luego se unió al Departamento de Justicia como fiscal federal en Jacksonville, manejando casos de drogas, fraude y armas. En esta etapa conoció a su esposo, Justin Duralia, un agente de la DEA.
En 2006, Moody regresó a Tampa con la mira puesta en convertirse en jueza de circuito. A pesar de las críticas por su falta de experiencia, ganó las elecciones y, a los 31 años, se convirtió en la jueza más joven del estado. Durante su mandato, presidió casos destacados como el de Trevor Dooley, donde rechazó una defensa bajo la controvertida ley de "Stand Your Ground".
Tras una década en el tribunal, Moody renunció abruptamente para postularse como procuradora general de Florida en 2016. En esta nueva etapa, adoptó una postura conservadora, apoyando causas como el derecho a portar armas en campus universitarios y la oposición al Affordable Care Act. Durante su mandato, también se alineó con el gobernador Ron DeSantis y el expresidente Donald Trump, respaldando demandas que cuestionaron los resultados de las elecciones de 2020.
Su lealtad al liderazgo republicano y su capacidad para impulsar causas partidistas la llevaron a ser considerada una de las figuras más influyentes del estado. DeSantis la nombró para sustituir a Rubio en el Senado, destacando su papel en iniciativas clave como la lucha contra el narcotráfico y su defensa de las leyes estatales controvertidas.
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