LOS ÁNGELES, California. – Los mariachis y músicos de Boyle Heights, símbolo de la cultura mexicana en Los Ángeles, se han convertido en una de las víctimas de las políticas migratorias impulsadas por la administración de Donald Trump.
Políticas migratorias de Trump golpean el trabajo de mariachis en Los Ángeles
Los mariachis de Boyle Heights denuncian que las políticas migratorias de Trump y el temor a las redadas de ICE y deportaciones han reducido considerablemente su trabajo y sus ingresos.

Varios músicos aseguran que el temor a redadas y deportaciones ha hecho que disminuyan las contrataciones para eventos comunitarios y celebraciones familiares.
“Sí nos ha afectado eso de las redadas. Ha bajado el trabajo”, explicó Javier Durán, músico local.
Cirilo Casillas, otro integrante de un grupo de mariachis, coincide en que el miedo se ha convertido en un factor determinante: “Estos últimos meses hemos tenido poco trabajo porque Trump nos tiene asustados”.
Deportaciones que afectan al gremio
Algunos músicos relataron que colegas han sido deportados recientemente. “Se han llevado muchos compañeros que están en Tijuana, en Guadalajara, se han llevado mucha gente”, dijo Raúl Martínez, otro mariachi.
Incluso aquellos que cuentan con documentos viven bajo incertidumbre. “Hasta nosotros que estamos con permiso tenemos miedo, dicen que nos va a correr a todos”, señaló Casillas.
El problema no se limita a las redadas: el alto costo de vida en Los Ángeles también está reduciendo las contrataciones. Antes, un grupo de mariachis podía tener hasta cuatro tocadas por semana, mientras que ahora apenas alcanzan tres, y con menor paga.
Según estimaciones, aunque un músico podría generar ingresos anuales de hasta 50 mil dólares, en la actualidad muchos apenas logran reunir 250 a 300 dólares por semana, lo que los coloca en una situación económica precaria.
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