No en la Proposicion 23: vota para salvar la vida de miles de pacientes de diálisis

En especifico, la Proposición 23, relacionada a los tratamientos de diálisis, ha desatado que tanto pacientes diálisis, como sus familias se opongan rotundamente y por eso piden a los votantes, elegir “no a la Proposición 23”, que pide que en California los centros de diálisis requieran la presencia permanente de médicos especialistas en problemas renales, que cada vez están más escasos.

Decenas de miles de pacientes de diálisis se oponen a esta propuesta, y sus razones son fuertes y valederas.

Sus vidas correrían grave peligro, pues añadir burocracia y sumarle costos innecesarios al obligar al médico especialista a estar presente siempre, forzaría a muchas clínicas de diálisis de la comunidad a reducir el número de citas, arriesgando las vidas de la diálisis renal pacientes que necesitan urgentemente tratamientos de diálisis para sobrevivir.

Esos gastos, repiten los pacientes, serían fatales para los centros de diálisis, además de ser innecesarios, pues cada clínica ya cuenta con enfermeras y técnicos altamente especializados para atender sus necesidades de tratamiento. Si se llega a ordenar la presencia obligada de nefrólogos, estos dejarían de tratar a miles de pacientes en hospitales y consultorios. Es una medida completamente innecesaria.

En caso de que la Proposición 23 fuese aprobada, los daños serían considerables, pues muchas clínicas de servicios de diálisis se verían obligadas a cerrar, resultando en más visitas de los pacientes a las salas de emergencia de los hospitales, aminorando su nivel de bienestar y posiblemente sus probabilidades de vida.

Por si esto fuera poco, el momento económico mundial no ayuda para nada y las pruebas lo demuestran: un estudio del reconocido Grupo de Investigación de Berkeley indicó que esas nuevas regulaciones burocráticas de la Proposición 23 aumentarían los costos de atención médica para los californianos en $ 320 millones de dólares cada año. Y con la pandemia, la alta tasa de desempleo y el futuro incierto económico que se vive, significaría quitar ese presupuesto para aliviar el hambre y las necesidades básicas de las familias californianas en necesidad.

Debe quedar claro que la Propuesta 23 no fue desarrollada ni por médicos, ni por expertos y cuando este dato se une a la dura realidad de la escasez de nefrólogos en California, los Estados Unidos y el mundo en general -insisten sus opositores- no debe ser aprobada.

Otra consecuencia, según el especialista, es que esos pocos centros que podrían operar bajo la Propuesta 23 se volverían tan costosos porque tendrían que pagar por tantas horas trabajadas por especialistas, que muchos pacientes estarían en riesgo de no poder pagar. .

Aquellos que apoyan la Propuesta 23 solo mencionan un sindicato, el que escribió la propuesta, mientras que la lista de oponentes a la Proposición 23 incluye a la Asociación Médica de California, la Asociación Estadounidense de Enfermeras de California, la Asociación de Hospitales de California, el Colegio Estadounidense de Cirujanos y la Academia Estadounidense de Auxiliares de Médicos de Nefrología (AANPA), la Asociación de Médicos Renales, la Asociación Latina de Diabetes y la Asociación Médica Nacional Hispana, entre muchas más.