Crean una línea directa de COVID-19 para residentes del condado de Travis que no tienen seguro médico

Para los ciudadanos no estadounidenses y los residentes permanentes no estadounidenses, las pruebas, el tratamiento o la atención preventiva relacionados con el coronavirus no están incluidos en la nueva prueba de carga pública.

Video Esto es lo que debe hacer una persona sin seguro médico con síntomas de coronavirus

AUSTIN, Texas- Los Centros de Salud CommUnityCare, financiados por Central Health, lanzaron este martes una línea directa con personal médico para evaluar a los residentes del condado de Travis sin seguro que experimentan síntomas similares a los de coronavirus.

Las personas que experimentan síntomas de COVID-19 que no tienen seguro y no tienen un médico establecido pueden llamar a la línea directa al 512-978-8775 para recibir orientación.

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A partir de este martes, los profesionales médicos atenderán los teléfonos y las llamadas, específicamente para las personas que no tienen seguro, para evitar que vayan directamente a una clínica, atención de urgencia o departamento de emergencias.

“Estamos trabajando con nuestros funcionarios locales de salud pública y la comunidad para contener la propagación del nuevo coronavirus (SARS-CoV-2) y su enfermedad asociada (COVID-19), y conocemos a los residentes del condado de Travis sin seguro y sin necesidad de un médico información ”, dijo el presidente y CEO de CommUnityCare, Jaeson Fournier.

La prueba para el coronavirus requiere una orden de un proveedor de salud y se basa en criterios de riesgo. Hay muchos casos en los que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) no recomiendan una prueba.

Por ahora, la línea directa está disponible de 8 a.m. a 5 p.m.

La línea directa es para personas sin seguro o pacientes de CommUnityCare que han estado en contacto cercano con una persona que tiene alguno de los síntomas de COVID-19.

Los síntomas de COVID-19 pueden incluir fiebre, tos seca y dificultad para respirar.

Para los ciudadanos no estadounidenses y los residentes permanentes no estadounidenses, las pruebas, el tratamiento o la atención preventiva relacionados con COVID-19 no están incluidos en la nueva prueba de carga pública.

Esto significa que la atención relacionada con COVID-19 no afectará negativamente su camino hacia la ciudadanía, y está permitido que un programa gubernamental pague por la prueba.