En la calle Broadway, a la altura de la avenida 19 en Phoenix, usted puede encontrar todo lo relacionado con los autos: llantas, motores, transmisiones, vidrios, y hasta autos completos.
La Catracha del ‘Yonke’ comparte su historia de éxito en los negocios
La inmigrante hondureña arrancó un negocio de compraventa de autos y piezas, y hoy narra cómo se abrió paso en un mundo considerado exclusivamente para hombres.

En la mayoría de los casos son hombres los que se encargan de la compra, y de la venta, pero si usted pregunta por la muchacha que trabaja en el deshuesadero, todo elmundo sabe de quien se trata.
"Si es la que yo pienso, le decimos Catracha nada más" dijo un Señor, "La Catracha, pues, es de por allá, de Honduras".
Alejandro Barahona, reportero de Univision Arizona fue a buscar a Marisela Gómez, y la encontró cargando un motor que acababa de vender.
"Le hacemos unos buenos nudos, para que no se caiga", dijo Gómez, inmigrante empresaria.
Manejando el tractor como si fuera de juguete, ella se comunica con su cliente hasta que logran cargarlo. Esta operación es cosa de todos los días y cada mañana esta madre le quita las cadenas al portón de su negocio, y una vez dentro comienza la acción. "Catrachos, catrachos, catrachos, catrachos (grita en el teléfono). Okay, lo tuyo son las llantas, $180”, dice Marisela Cruz Gómez por el teléfono.
Marisela lleva tres años al mando del negocio, pero no ha sido nada fácil.
"Al principio cuando agarré la rienda del negocio, hablaba por la línea caliente y a veces los clientes no me los mandaban por ser mujer, decían ellos”, explica Gómez.
Recién llegada al país en el 2014 lo único que tenia a su favor era un permiso de trabajo, y no podía desperdiciar la oportunidad.
"Un día vino y me dijo sabes que, quiero poner un negocio, me dijo mi hermano. Qué negocio quieres poner, quiero poner un negocio en el área que yo trabajo", dijo Gómez.
Y fue así como comenzaron a preparar todo para arrancar este negocio familiar.
"Primero buscamos el lugar, que fue aquí, comenzamos a buscar, hacer los rótulos, todo, y metimos los tramites de la licencia".
Con un poco de paciencia y perseverancia obtuvieron los permisos requeridos por la ley, y en el 2017 se estableció Catrachos Auto Salvage.
"Poco a poco me fui ganando a ellos, me fui conociendo, y ellos comenzaron a mandarme los clientes, por medio de la línea caliente, que es una línea que nos radiemos todos, donde dicen que partes tienen y que partes no” explica la catracha.
Y vendiendo de parte en parte es como Marisela se gana la vida.
"Tratamos de vender todo lo que se pueda vender, ya cuando el carro miramos que son partes que ya no se pueden vender, pues si lo tiramos al área de recycle”, dijo Marisela Cruz Gómez.
Y si este trabajo le parece pesado, la vida de Gómez no ha sido fácil.
Gómez asegura que de joven había caído en manos de los Zetas cuando intentaba cruzar la frontera, enfrentó violencia domestica aquí en Arizona, lo cual le abrió los ojos y le dio fuerza para seguir luchando por su hijo y un estatus legal en este país.












