Este domingo, 19 de enero de 2020, acudió a la misa en Sandringham, donde aún permanece vacacionando. Llamó la atención que en esta ocasión la acompañó su hijo, el príncipe Andrés, duque de York, quien en noviembre del año pasado anunció su retiro de los eventos públicos, tras ser señalado por sus vínculos con el convicto magnate Jeffrey Epstein.