François Graftieaux, de origen francés, asegura que su padre fue producto de la relación entre el rey Edward VIII y la costurera Marie-Leonie Graftieaux. Por tal motivo, ha solicitado en dos ocasiones muestras de ADN de la reina Isabel II, pero no ha tenido éxito. Es por ello que pidió ayuda al palacio de Buckingham y, de no obtener respuesta, "tomará medidas legales".