Este 30 de julio dio inicio el juicio del rapero estadounidense cuyo nombre real es Rakim Mayers, y quien fue detenido desde el 3 de julio en Estocolmo, Suecia, acusado de agredir y asaltar a unos jóvenes tras una pelea callejera. Su detención provocó que Kim Kardashian pidiera ayuda al presidente Donald Trump para interceder en su liberación.