Un equipo de científicos de la Universidad de Montreal y del Centro Médico de la Universidad de Michigan ha descubierto que la exposición a la televisión en edades muy tempranas tiene efectos negativos en las capacidades cognitivas de los niños.
Ver televisión desde los dos años perjudica a los niños

Cada hora adicional de televisión que vea un niño a la edad de dos años se corresponde con una reducción futura de su implicación en su formación escolar y en sus habilidades matemáticas.
Además, la televisión incrementa las posibilidades de victimización por parte de los compañeros de clase y un aumento del índice masa corporal debido al estilo de vida sedentaria y al consumo de comida chatarra.
Según los científicos, la infancia temprana es un periodo clave en el desarrollo del cerebro y la formación del comportamiento, por lo que altos niveles de consumo de televisión durante este periodo pueden producir malos hábitos de salud y pésimos resultados académicos en el futuro.
En la investigación participaron un total de 1.314 niños cuyos padres especificaron la cantidad de televisión que veían estos niños a los 29 meses y a los 53 meses.
A los profesores de los participantes se les pidió que evaluaran a los niños desde el punto de vista académico y psicosocial y también en sus hábitos de salud, cuando éstos tenían ya 10 años.
Según la investigación, ver la televisión a partir de los 2 años genera:
* una disminución del 7% en la participación en clase
* un 6% de disminución en el rendimiento en matemáticas
* un aumento del 10% en la victimización según compañeros de clase
* un 13% de disminución en el fin de semana de actividad física
* un 9% de disminución en la actividad física en general
* un mayor consumo de bebidas gaseosas
* a un pico de 10% en la ingesta de comida chatarra
* a un 5% de aumento en el índice de masa corporal









