El coronavirus continúa siendo un riesgo palpable en el territorio estadounidense, pero en Florida, recientemente se alertó a la población por otro grave peligro: se registró el caso de una persona infectada por una amiba potencialmente mortal.
Una ameba come-cerebros levantó la alerta de Florida en plena pandemia: lo que debes saber

One person contracted Naegleria fowleri in Hillsborough County. Naegleria fowleri is a microscopic single-celled living amoeba. The amoeba can cause a rare infection of the brain called primary amebic meningoencephalitis (PAM) that destroys brain tissue and is usually fatal. pic.twitter.com/icT66tqlkU
— DOH - Hillsborough (@DOHHillsborough) July 3, 2020
Se trata de la ameba Naegleria fowleri, la cual se puede localizar en las aguas dulces de regiones calurosas. Regularmente se encuentra en los estados sureños de EE.UU. gracias a las temperaturas cálidas: la amiba se desarrolla en temperaturas de 115 grados Fahrenheit (unos 46 °C) y se alimenta de bacterias.
Aunque parece un incidente asilado por ahora, el reciente caso suscitado en plena pandemia por COVID-19, hizo que el Departamento de Salud de Florida lanzara una advertencia a los residentes del condado de Hillsborough. A través de un comunicado, recomendó que no se nadara ni buceara en estanques, ríos o lagos de agua dulce.
La Naegleria fowleri infecta a los seres humanos cuando el agua contaminada entra en el cuerpo a través de la nariz, así lo mencionan los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés.)
Al momento de entrar, la amiba puede dirigirse fácilmente hacia el cerebro. Allí destruye el tejido cerebral y puede provocar la muerte en menos de una semana. Cabe destacar que las infecciones por Naegleria fowleri son extremadamente raras en Estados Unidos: entre los años 2009 y 2018, únicamente se notificaron 34 casos.

De los 34 pacientes mencionados, 30 se infectaron por sumersión directa en agua dulce. Mientras tanto, tres fueron diagnosticados tras usar agua del grifo para irrigar sus narices. El último caso, se dio por entrar en contacto con agua contaminada mientras el individuo estaba en un tobogán casero.
Los síntomas que indican la posible presencia de Naegleria fowleri en el cuerpo son: dolor de cabeza, fiebre, náuseas, desorientación, vómitos, rigidez de cuello, convulsiones, pérdida de equilibrio y alucinaciones en el peor de los casos.

Es importante resaltar que la ameba únicamente puede entrar al cuerpo por la nariz. Las personas no pueden contraerla por beber agua contaminada, y no se propaga a través del vapor o por gotas en aerosol. Tampoco es contagiosa de persona a persona.
Ante todo, las personas deben evitar actividades deportivas relacionadas con el agua dulce. Además, hay que evadir el contacto nasal directo con el agua del grifo.

Es importante no entrar en pánico y seguir las recomendaciones de las autoridades locales. Los casos son muy raros, pero escatimar en medidas preventivas no es opción.
Ve también:







