Un judoca medallista fue asaltado en Río de Janeiro

Todo parecía ser felicidad para Dirk van Tichelt, judoca belga que consiguió la tercera posición en la categoría para menores de 73kg, y por ende consiguió la medalla de bronce. Siendo un deportista y formando parte de una delegación primer mundista como la de Bélgica, uno podría pensar que la celebración de la conquista estaría controlada... pero no.

En la noche del lunes, mientras festejaba su desempeño en Copacabana, el atleta fue víctima de un asalto donde le robaron su teléfono móvil, pero más importante que eso, le destrozaron su ojo izquierdo. A priori, era uno de los tantos crímenes que se ven por Río de Janeiro, pero cuando van Tichelt intentó perseguir a su agresor, un golpe en la cara lo tomó por sorpresa y le dejó un ojo morado.

Por suerte la policía estaba cerca y la cosa no pasó a mayores, aunque lamentablemente, el atleta de 32 años se llevará un recuerdo poco grato que seguramente empañe un poco la parte deportiva. Si bien el judo es un deporte de luchas, se trata de una disciplina sumamente técnica donde el respeto por el rival lo es todo, y que en situaciones como esta donde el "contrincante" te toma mal parado y de sorpresa, poco se puede hacer por el combate.

Si otras fuesen las circunstancias, probablemente los asaltantes lo hubiesen pasado bastante mal ante un luchador profesional. Pero en la ley de la calle y contra los reyes del delito, un ojo hinchado y un smartphone son un precio no tan caro en comparación.

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