Durante muchísimos años, el actual presidente de Estados Unidos se mostró en contra de las vacaciones. «¿Cuál es el punto?», se preguntó en más de una ocasión y es que para él «si no estás disfrutando de tu trabajo, estás en el trabajo equivocado». Y, además, manifestó en una entrevista que «la mayoría de las personas que conozco que tienen éxito no se toman vacaciones. Sus negocios son sus vacaciones».
Trump es un antivacaciones, pero así disfruta de sus días libres


Quizá no comprendió la importancia del descanso y las vacaciones en la vida de las personas. O al menos no lo hizo hasta que se convirtió en presidente. Finalmente, a mediados de 2017 decidió tomarse 17 días de vacaciones. ¿Se fue a Rusia? ¿A las playas de México? No, todo lo contrario. Dedicó sus 17 días a jugar…
¿Monopoly?
Currently on display on the Museum of Failure...oddly declaring bankruptcy is a way to win. Just read chapter 11 in any of his books. pic.twitter.com/sQB4ZhiskC
— Mike Panco (@youllbebored) July 6, 2017
No, aunque bien podría haber jugado con su propio Monopoly. Trump decidió pasar 17 días en su club de golf privado en Nueva Jersey. Sí, pasó 17 días jugando al golf.
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A su vez, según The Guardian, Trump ha pasado 13 de los 28 fines de semana en la Casa Blanca —hasta agosto— fuera de Washington. Con frecuencia opta por clubes de golf, aunque alguna que otra vez viajó a Florida.
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