Hay rumores de que Jennifer Aniston será mamá (no importa cuando leas esto), diversos medios han anunciado que (ahora sí) la actriz de 48 años recurrió a la subrogación de vientre y será madre de una niña el próximo 2018 junto a su esposo, el actor Justin Theroux. Hasta el momento la pareja no ha confirmado nada.
Tal vez Jennifer Aniston nunca sea mamá y tenemos que aprender a vivir con eso


¿Por qué tanta obsesión?
No es la primera vez que los titulares anuncian efusivamente a Jennifer como mamá y aunque ella ha declarado en diversas ocasiones que está harta de que especulen sobre una supuesta maternidad, el hecho sigue dando de qué hablar.
Los rumores surgen de todas partes, incluso cuando Jennifer simplemente está hinchada por haber comido algo pesado.
«Si tu cuerpo está normal después de haber ingerido un bocado o dos, o si estás teniendo un momento de hinchazón, entonces hay gente señalando tu estómago y diciendo que estás embarazada», dijo en una entrevista a con Glamour.
En otra ocasión Jennifer habló sobre su lucha constante contra los rumores de supuestos bebés y consideró que las mujeres deben ser tratadas con más respeto.
«Estamos viendo a las mujeres a través de una lente muy estrecha, de modo que si no tenemos un bebé o una cerca blanca, entonces somos inútiles».

Y aunque ella es muy hermética respecto a su vida privada, es notorio su hartazgo pues incluso se tomó el tiempo de escribir una carta abierta aclarando esta situación que tiene a todos obsesionados:
«Puede que algún día llegue a ser madre, y si alguna vez lo hago, seré la primera en hacérselos saber».
La actriz no descarta la posibilidad de ser madre, sin embargo está molesta porque pareciera que la maternidad es algo que la gente espera de ella como si esto fuera lo único que le falta para ser una "mujer realizada":
«No busco la maternidad porque me siento incompleta de alguna manera», continuó.

La realidad es que el cuerpo de Jennifer está cambiando como el de todas nosotras al pasar los años. Es una mujer de carne y hueso como cualquier otra y también puede inflamarse después de comer.
«Me molesta que me hagan sentir menos porque mi cuerpo está cambiando o almorcé una hamburguesa y me fotografiaron desde un ángulo extraño y por lo tanto, consideraron una de estas dos cosas: 'embarazada 'o' gorda'», reflexionó.
Sin mencionar lo incómodo que debe ser que amigos y extraños te feliciten por el embarazo ficticio que los medios anunciaron como verídico.

Estamos obsesionados con la idea de que Jennifer Aniston tiene que ser mamá porque no podemos concebir que las mujeres sean personas completas y realizadas aún sin ejercer la maternidad.
La sociedad debe aceptar el hecho de que así como hay hombres que eligen no ser padres, también hay mujeres que toman esta decisión y está perfectamente bien.
Ser mamá o no, no debería ser un asunto público, es una decisión privada. Incluso la misma Jennifer ya había reflexionado en este punto:
«Tener un hijo, como sabemos, no es asunto de nadie, excepto de la pareja o de la persona que está pasando por eso».
Así que, ¿por qué no dejamos los rumores a un lado y respetamos las decisiones que las mujeres toman respecto a sus cuerpos y sus vidas?
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