En una noticia a la que el legendario pintor catalán no hubiera dudado en buscarle el costado humorístico o absurdo, este lunes un juez español ha ordenado la exhumación de los restos de Salvador Dalí, ante el argumento de una mujer de Girona que asegura ser su hija.
Restos de Salvador Dalí serán exhumados por demanda sobre paternidad

La corte que ordenó la exhumación pretende obtener muestras de ADN de sus restos, para determinar si el pintor que experimentaba la alegría de ser Salvador Dalí es el padre biológico de la mujer que presentó este alegato.
El pedido de exhumación se justificó además aclarando que no es posible acceder a otras pruebas biológicas u objetos personales que podrían servir para realizar un estudio comparativo.
¿Producto de un romance clandestino?

La demandante, María Pilar Abel Martínez, nació en Girona en 1956 y asegura que su madre, una criada, tuvo un romance con el pintor durante 1955.
Pilar Abel, de profesión adivina (habilidad que no suena descabellado pensar podría haber heredado de su supuesto padre), ha hecho público su alegato desde 2015.
Antes, se había sometido a dos tests de ADN para comprobar la identidad de su padre biológico, pero nunca recibió los resultados, lo que ahora también se cita como una de las razones para ordenar la exhumación.
Abel dice que su madre, Antonia, trabajaba como sirvienta de una familia que ocasionalmente vacacionaba en Cadaqués y eran amigos de Dalí.
En Cadaqués está el pueblo de Port Lligat, famoso por ser el lugar de residencia de Dalí, y donde ahora está el museo dedicado al pintor.
Según la demandante, su madre le aseguró en varias oportunidades que ella era hija del famoso pintor surrealista.
También sostiene haber heredado los rasgos y los gestos de Dalí. «Sólo me falta el bigote» ha dicho.
En 1955, al momento de este presunto affaire con la madre de Pilar Abel, Salvador Dalí estaba casado con Gala Dalí, su famosa musa inspiradora, con la que mantuvo una relación (abierta) desde 1929 hasta la muerte de ella, en 1982.

Salvador Dalí y Gala no tuvieron hijos.
Si eventualmente el análisis de ADN comparativo comprueba que Pilar Abel es la hija biológica de Salvador Dalí, ella podría utilizar su apellido y además tener derecho a parte de su herencia, aunque también debería establecer una demanda legal para que esto suceda.
Esta eventual comprobación también añadiría un capítulo más a la discutida y compleja vida sexual de Salvador Dalí, que incluye aparentemente una prolongada virginidad originada en su miedo a ser tocado y a los genitales femeninos, rumores sobre un supuesto romance con Federico García Lorca, una relación famosamente abierta con su esposa Gala que él prefería disfrutar de manera voyeurista, organizando orgías en su mansión, y una comprobada preferencia por la masturbación, retratada en su famoso cuadro El gran masturbador.






