¿Puede un parásito hacer que alguien se quite la vida?

Llevamos años viendo filmes como La invasión de los ladrones de cuerpos o The Faculty, donde seres de otro mundo invaden el cuerpo humano y hacen de él poco más que una malvada vaina vacía de intelecto y llena de malas ideas. Pero ¿podría darse el caso de que esta loca trama no fuese tan desatinada y realmente hay un parásito capaz de lograr que alguien se quite la vida?

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Toxoplasma gondii, el parásito que puede hacer que te quites la vida

Los seres humanos nos enorgullecemos de nuestros cerebros. Pero ¿qué pasa cuando estos no funcionan correctamente? ¿Pueden llevarnos a cometer mil locuras mientras creemos que estamos realmente cuerdos?

Y aquí es donde entra en juego el parásito más interesante sobre la faz de la Tierra, Toxoplasma gondii. Estos protozoos unicelulares viven en las tripas de los gatos produciendo huevos como células capaces de encontrar el camino de salida para introducirse en otros animales cuando entran en contacto.

Luego, cuando localizan un nuevo huésped, este parásito cambia y migra pudiendo incluso instalarse en el cerebro de la otra criatura. Y aquí es cuando viene la diversión.

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Las peculiaridades del parásito Toxoplasma gondii

Este parásito solo puede continuar su ciclo vital si es capaz encontrar su camino hasta la tripa de un gato. ¿Cuál es la forma más sencilla? Siendo comido por un felino. Y curiosa e increíblemente, Toxoplasma gondii ha evolucionado para provocar que algo así suceda.

Uno de los descubrimientos más increíbles se ha producido al comprobar que es incluso capaz de alterar el comportamiento de las ratas al infectarlas con una precisión quirúrgica. Así pues, el animal pierde el miedo al olor felino inhibiendo sus vías neuroquímicas cerebrales.

Ahora bien, y dado que un tercio de la población mundial portamos al Toxoplasma en nuestro cerebro, ¿sería posible que este actúe en un ser humano al igual que lo hace con las ratas pese a que nuestros mecanismos son más grandes y complejos?

Así pues, los científicos están investigando y los resultados son más preocupantes de lo que a priori se pensaba. Ya en 2003 el doctor E. Fuller Torrey demostró que las mujeres con altos niveles de parásitos tenían mayor posibilidades de sufrir esquizofrenia.

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Más trabajos sobre los parásitos en humanos

Al continuar estos trabajos, se ha descubierto una relación entre el suicidio y las infecciones parasitarias. Es decir, que si tienes muchos de estos Toxoplasmas en tu cerebro, tus posibilidades de suicidio podrían ser muy elevadas, aunque las conexiones a este estudio aun son débiles.

Pero tras una investigación entre 45 mil mujeres danesas se ha descubierto que de las infectadas con Toxoplasma, un 54 % eran propensas al suicidio violento. Así que se podría concluir con que este parásito podría considerarse como que tiene una gran influencia en nuestra personalidad, volviéndonos más neuróticos y propensos a la auto violencia. Aunque de momento solo se puede afirmar que existe una coincidencia, no una causalidad.

Ya veremos cuando haya más datos...

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