Los bomberos voluntarios son héroes cotidianos que día a día arriesgan sus vidas por una causa noble sin cobrar un peso. Las distintas agrupaciones sobreviven a base donaciones por parte del estado, civiles y otras organizaciones.
¿Por qué hay bomberos voluntarios? Conocé la historia de estos héroes cotidianos

Sin embargo, ¿alguna vez te preguntaste por qué funciona así? ¿Cuál es la razón de la existencia de estos cuerpos que desinteresadamente acuden a nuestro rescate? Para ello, tenemos que remontarnos al 1800.
En aquella época, el Estado tenía funciones más limitadas y su presencia era escasa. Por esta razón, muchas veces sucedía que ante un incendio, eran los vecinos los que tenían que acudir a apagar las llamas.

La historia de los primeros bomberos voluntarios
Esto fue lo que pasó en el barrio porteño de La Boca a principios de 1884, cuando una chispa provocó un incendio en unas casillas, construidas con zinc y madera (elementos altamente inflamables). Los vecinos se organizaron y lograron extinguir las llamas sacando agua del río.
Esto motivó a un vecino del barrio Tomás Liberti a crear, junto con su familia, el cuerpo de bomberos de La Boca, el primero del país. La idea fue exitosa y comenzó a replicarse en otras localidades donde el Estado no estaba presente.
Recién en 1954, se creó una Federación Argentina de Bomberos Voluntarios que al día de hoy agrupa a todas las organizaciones del país. En la actualidad, estos cuerpos constituyen el 85% de la fuerza y batallan codo a codo con los bomberos provinciales o de la policía, pero siempre fieles a su origen.
Sin embargo, el argentino no es el único caso en América Latina. Un ejemplo paradigmático es el de Chile, cuyo cuerpo de bomberos rechazó en 2015 recibir una remuneración por parte del Estado. ¿La razón? Mantener la tradición.
Si bien muchos voluntarios se resisten a la idea de recibir un sueldo, todos coinciden en que el estado podría aportar más equipos e insumos para combatir las llamas. Las donaciones también constituyen una gran fuerte de ingresos para ellos, quienes en la mayoría de los casos precisan de otros empleos para subsistir.
Para contribuir con su valiente lucha, podés donar a la Fundación Bomberos Voluntarios, que contribuye a mejorar el equipamiento de estos héroes cotidianos.






