¿Los zurdos son física o psicológicamente más vulnerables? Esto dice la ciencia

Los zurdos son una minoría en el mundo entero, son menos las personas que usan su mano izquierda como mano dominante y eso genera que tengan que adaptarse a un mundo pensado para derechos. ¿Pero eso genera consecuencias físicas o psicológicas para sus vidas?

Desde sus comienzos, la neuropsicología buscaba entender lo que estaba mal con la minoría zurda de la especie humana. Hasta que comprendieron que la mano tiene una base genética y que cualquier intento de cambiarla puede tener consecuencias perjudiciales para el desarrollo.

Además, se descubrió que los zurdos han permanecido estables del 10 al 15 % de la población humana durante miles de años, reflejando el hecho de que si realmente eran más débiles, su número hubiera disminuido hace tiempo.

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Poca evidencia para elaborar teorías

Pero hasta el día de hoy se sigue cuestionando si los zurdos son más vulnerables ante enfermedades físicas y psicológicas, aunque no hay una evidencia realmente estable que apoye esas afirmaciones.

Un estudio de 1999, reveló que los zurdos tenían períodos de vida más cortos que los derechos. Pero los resultados fueron desacreditados e investigaciones posteriores no encontraron diferencias significativas en las tasas de mortalidad.

Muy poca evidencia indica que los zurdos son más propensos a desarrollar dolencias físicas. Hay investigaciones especulativas que sugieren que los zurdos pueden tener un mayor riesgo de síndrome de piernas inquietas y asma, pero otras investigaciones afirman que los zurdos tienen un menor riesgo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica y neumonía.

Algunos investigadores han propuesto una tenue asociación entre la mano y el riesgo de esquizofrenia, así como el pensamiento creativo. Los estudios sugieren que un número significativamente menor de personas que usan constantemente su mano derecha desarrollan esquizofrenia, en comparación con las personas zurdas que usan su mano no dominante para actividades comunes. Pero esta observación carece de una explicación causal.

Lo comprobado de los zurdos

Lo que sí se ha comprobado es que los zurdos son menos propensos a usar el hemisferio izquierdo para el lenguaje. En la gran mayoría de la población, la función del lenguaje casi siempre se localiza en el hemisferio izquierdo. Esta es la razón por la cual un accidente cerebrovascular u otra lesión cerebral sufrida en el lado izquierdo del cerebro tiende a conducir a problemas de lenguaje.

Entre los diestros, la predominancia del lado izquierdo por el lenguaje alcanza el 95 % de prevalencia. Sin embargo, entre los zurdos esto disminuye al 70%, los restantes tienen un lenguaje localizado en el hemisferio derecho, o se distribuyen uniformemente entre ambos hemisferios.

La ciencia ha comprobado que a medida que envejecen las personas tienden a usar ambas manos. Un estudio de 2007 a cargo de Tobias Kalish, reunió a 60 participantes todos fuertemente diestros y los probaron en una serie de tareas manuales complicadas.

Mientras que los participantes más jóvenes (edad promedio de 25 años) se desempeñaron mucho mejor con la mano derecha en todas las pruebas, los diestros de mediana edad (promedio de 50 años) se desempeñaron igual de bien con las dos manos en la tarea de apuntar. Y dos grupos mayores (edad media 70 y 80 años) se desempeñaron bien con las dos manos en casi todas las tareas.

Desafortunadamente, para los expertos, la principal razón de la mayor ambidiestrabilidad de los participantes mayores, fue el hecho de que habían perdido su desempeño superior con su mano derecha.

Muchos sugieren que como la mayoría de las cosas están construidas para derechos, es posible que los zurdos sean más propensos a lesiones físicas en el trabajo o accidentes al conducir.

Pero estudios también muestran que los atletas profesionales zurdos pueden tener una ventaja sobre los derechos, dado que sus movimientos son menos predecibles.

Si bien se puede asociar a los zurdos con ciertos comportamientos o riesgos, la evidencia que hay en la actualidad no respalda el hecho de que los zurdos sean más vulnerables o tengan más riesgos.

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