Desde mediados del siglo pasado en que comenzó la era de los viajes tripulados o no al espacio exterior, la humanidad ha dado pasos agigantados hacia el conocimiento del universo más allá de los límites de nuestro pequeño planeta. Entre las últimas misiones espaciales en pleno desarrollo hay una que, al no haber alcanzado el clímax de su importante misión aún, no ha sido tan divulgada como otras y es totalmente desconocida para muchos, nos referimos al viaje hacia un cometa que realiza la sonda espacial europea “Rosetta”.
La misión de la sonda espacial Rosetta

El largo viaje de la sonda espacial

La sonda espacial Rosetta despegó de la Tierra el 2 de marzo del 2004 desde la Guayana francesa a bordo del cohete Arianne 5, el cual tenía como misión superar la atracción de la gravedad terrestre y darle el impulso necesario para emprender su larga misión.
No obstante esta energía no era suficiente para llegar a su destino y, para alcanzar la velocidad necesaria para el viaje, fue necesario también aprovechar el impulso gravitacional no solo de la Tierra sino también de nuestro vecino, Marte. Así, la nave se acercó tres veces a nuestro planeta y una vez al planeta rojo (en el 2007), recibiendo la energía cinética suficiente para adentrarse en el cinturón de asteroides del sistema solar y acercarse a su destino.
La misión de la Sonda Rosetta
La valiosa misión de esta sonda espacial es investigar la composición química del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, así como sus características topográficas, su temperatura, etc… Aunque inicialmente su objetivo era otro cometa, los retrasos en el lanzamiento por diversas causas hicieron necesario cambiar el destino del viaje.
De completarse correctamente, el conocimiento que se extraiga de esta misión será de vital importancia para entender mejor los orígenes del sistema solar ya que, según las teorías, estos cuerpos se caracterizan por apenas haber variado químicamente desde la formación del mismo hace más de cuatro mil millones de años atrás.
En el caso del origen de nuestro planeta, esta misión, la primera que estudiará de manera tan detallada un cometa, podría confirmar si estos cuerpos efectivamente pueden trasportar importantes cantidades de agua o formas orgánicas que pudieran haber llenado de este líquido los océanos del planeta y/o inoculado la vida en el mismo, como plantea la controvertida Teoría de la Panspermia.
¿Qué hará la sonda cuando llegue al cometa?

La sonda espacial, que este 20 de enero del 2014 ha despertado de un largo período de hibernación diseñado para ahorrar energía, debe acercarse al cometa en mayo de este año y entrar en su órbita en el mes de agosto, con lo que dará comienzo el proceso de cartografía de su superficie.
Esto será lo máximo que se aproximará la sonda, sin embargo, en su interior se encuentra un módulo robot de altísima tecnología llamado Philae que, una vez seleccionado un sitio adecuado, se posará sobre la superficie del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko y comenzará la toma y análisis de muestras, lo cual debe ocurrir en el mes de noviembre de 2014.
Los datos procesados serán enviados a la Tierra para ser analizados por los científicos hasta el fin de la misión en diciembre del 2015, cuando al alejarse del Sol, la sonda se volverá inactiva y se dará por finalizado otro hito de la investigación espacial.
Fascinante el viaje de la sonda Rosetta, ¿verdad? ¿Quieres saber más sobre las misiones espaciales?









