La medicina tiene la excusa perfecta para faltar a clase

La vuelta a la escuela: una época complicada para todo niño. Por un lado, la emoción del reencuentro con los amigos. Por otro, el adiós al verano y a las vacaciones y la vuelta de los deberes.

Es probable que el porcentaje de enfermedades fingidas crezca exponencialmente al comienzo del año lectivo; un acto desesperado por prolongar el verano unos días más. Pero, según un estudio reciente realizado por médicos del Nationwide Children’s Hospital (Ohio, Estados Unidos), puede que no solo aumenten las simulaciones.

¿La escuela es un dolor de cabeza?

La Dra. Anne Pakalnis, quien llevó adelante la investigación, explicó que muchas de las familias que trataban en el hospital expresaban que sus hijos sufrían más dolores de cabeza durante el año escolar. Junto con otro neurólogo, el Dr. Geoffrey Heyer, decidieron analizar los registros de visitas a emergencias e investigar si lo que percibían estas familias era comprobable de forma estadística.

La conclusión a la que llegaron fue la que miles de niños ya sospechaban. Efectivamente, al agrupar las visitas por estación, el otoño (época en la que los niños suelen volver a la escuela) fue el período que presentó más consultas por dolores de cabeza entre niños y adolescentes.

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¿Por qué nos duele la cabeza?

Existen dos tipos principales de dolor de cabeza: la cefalea tensional y la migraña.

La cefalea de tensión es el tipo de dolor de cabeza más común. Se produce por la tensión en los músculos del cuello y el cuero cabelludo, la cual puede deberse a factores como el estrés, la ansiedad, la depresión o incluso a lesiones en la zona. Cualquier actividad que nos haga mantener la cabeza en la misma posición por un tiempo prolongado puede contribuir a este tipo de cefalea.

Por otro lado, las migrañas tienden a ser dolores mucho más intensos y suelen estar acompañadas por otros síntomas como náuseas, vómitos y sensibilidad a la luz y el sonido. Las causas de las migrañas no están del todo claras y pueden desencadenarse por factores que varían desde comidas específicas (como productos lácteos, chocolates y frutas, entre otros) a cambios en los patrones del sueño, cambios hormonales, estrés, ansiedad, etc.

Durante el año escolar, los niños suelen estar expuestos a situaciones de mayor estrés y tienden a tener actividades extracurriculares que pueden afectar la regularidad de sus comidas y sus patrones de sueño. Todos estos son factores que se asocian a la aparición de dolores de cabeza de diferentes tipos.

• Ver también: «Qué es el síndrome de la cabeza explosiva»

Cómo evitar los dolores de cabeza

Según el Dr. Howard Jacobs, un especialista en dolores de cabeza del antedicho hospital: «si no enchufas tu cerebro y le proporcionas energía, no funcionará bien y eso causa dolores de cabeza».

Según este médico, se pueden prevenir dolores de cabeza al consumir tres comidas al día, dormir lo suficiente durante la noche (sin compensar con siestas durante el día), mantenerse hidratado y evitar el estrés. Los calmantes comunes, como el ibuprofeno, pueden ayudar, pero si se toman muy seguido pueden terminar empeorando la situación.