La extrema derecha en Francia está ganando terreno. ¿Podrá triunfar en las elecciones?

Al escribir este artículo me fue inevitable no trazar paralelismos entre Donald Trump y Marine Le Pen. Cada oración que leía y escribía me hacía pensar en lo que estamos haciendo como sociedad. Es muy claro que si esos líderes políticos radicales y con ideas tan extremistas llegaron o llegan al poder es porque alguien los votó. Es decir, no es por arte de magia. Así es la democracia… Pero me aterra pensar que esas personas representan el pensamiento colectivo. No me dan temor ellos… me da temor la sociedad. Porque somos nosotros los que decidimos colocarlos ahí.

Es decir, si la extrema derecha ganó terreno en la política internacional es porque esta misma ganó terreno en toda la población. Y quizá sea eso lo que más miedo me da. Un temor que se cristalizó hace ya algún tiempo en Donald Trump. Y que ahora se cristaliza en Marine Le Pen.

Tradición familiar

Probablemente te preguntarás, ¿quién es Marine Le Pen? Es la candidata del Frente Nacional de Francia (FN), un partido de extrema derecha. El FN fue fundado en 1972 por Jean-Marie Le Pen, el padre de la actual líder.

Le Pen padre fue duramente criticado por ser de extrema derecha y, además, ser xenófobo. Tanto “odio” generó en Francia que, desde el primer momento, Marine Le Pen intentó poner distancia con la postura de su padre.

Es curioso como un extremista de derecha quiere alejarse de las ideas de otro extremista de derecha. Pero lo cierto es que ellos difieren en una cosa: J ean-Marie considera a las cámaras de gas como un simple “detalle de la historia”, mientras que Marine reconoce y lamenta el Holocausto. Para un país que padeció el Holocausto, esta postura fue letal. Marine Le Pen se ganó el cariño por diferenciarse de su padre en ese punto. No obstante, decidió seguir en su camino de extrema derecha, solo que aceptando que el Holocausto fue una gran y triste parte de la historia mundial.

Sus convicciones

Para la líder política del FN, la votación del Brexit fue el acontecimiento más importante luego de la caída del muro de Berlín. Además consideró que la victoria de Donald Trump fue una piedra fundamental “para la construcción de un mundo nuevo” (dícese un mundo más radical, nacionalista y xenófobo).

• Por un lado, Le Pen, se manifestó en contra de la inmigración ilegal, especialmente en la de los refugiados. Y argumentó que para vivir en Francia y tener su ciudadanía, una persona debe “heredarla o merecerla” (sí, parece que la ciudadanía es una cuestión de merecimientos).  
• A su vez, explicó que suspenderá todo tipo de servicio gratuito para los inmigrantes indocumentados: desde la educación hasta la salud. “Si llegan a nuestro país, no esperen ser atendidos. El tiempo de juego ha terminado”, dijo en un discurso.
• La exaltación del nacionalismo también estuvo presente en sus discursos. Los puestos de trabajo, la vivienda y la escuela, así como cualquier otra área pública deben satisfacer primero las necesidades de los franceses.
• Dentro de esta idea de nacionalismo, es que se gestó la posibilidad de un “Frexit”. Al igual que en Gran Bretaña, esta posible salida de la Unión Europea busca independizar a Francia y mejorar su situación política y social.
• El terrorismo no iba a estar a un lado de la propuesta: Le Pen quiere sacar de su país a todo aquél que predice el odio. Pero… al igual que Donald Trump, olvidó que ser musulmán no es sinónimo de terrorismo.
• La pena de muerte también está dentro de sus planes: el FN es el único partido que busca restablecerla. Y el 60% de los votantes de ese partido está a favor de esta resolución.

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¿Ganarán las elecciones?

La votación en Francia está compuesta por dos ruedas. El 23 de abril será la primera. En esta rueda, según las encuestas, ganará Le Pen con un 25%. No obstante, se espera que en segunda rueda sea vencida por Emmanuel Macron, exministro de economía.

Las encuestas creen que no ganará Le Pen. Sin embargo, muchas veces demuestran que sus predicciones no son siempre tan efectivas. En el caso de Donald Trump sucedió eso, ¿lo recuerdas?

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