A pesar de las diferencias entre países o instituciones públicas y privadas, la enseñanza tiende a organizarse básicamente de la misma manera. Con diferentes materias y un método similar.
La ciencia ha encontrado la forma más efectiva de aprender

Si bien ha sabido ser una manera efectiva de mantener el caos y ayudar a los maestros y profesores a organizar sus días, la ciencia asegura que de esta manera no se puede acceder a un método de estudio que ayuda a aprender más rápido.
Un método útil

La investigación sugiere que si queremos que el material de estudio se quede en nuestro cerebro, la mejor forma de estudiar es la que se conoce como « práctica distribuida».
Para dominar un nuevo concepto, el estudio sugiere que lo mejor es estudiar de forma intensa durante un corto período de tiempo, luego tomar un descanso y volver a tener un corto período intenso.
Al parecer, las breves pero intensas ráfagas de aprendizaje durante un lapso ayudan a mantener mejor los conceptos.

El profesor de la Universidad Kent, John Dunlosky (uno de los encargados del estudio) sostiene que las técnicas actuales que usan los estudiantes, como la relectura o el subrayado de lo importante, tienen pocos beneficios en el aprendizaje.
En la investigación se analizaron 10 técnicas diferentes de aprendizaje usadas por los estudiantes. Cada técnica probó tener una efectividad diferente, pero dos estrategias: la práctica distribuida y las pruebas de práctica demostraron tener la mayor utilidad.
La mayoría de los estudiantes tienen más familiaridad con las pruebas de práctica, usando test de pruebas de otros años para repasar ejercicios o el uso de tarjetas de memoria, pero la técnica de práctica distribuida, que probó ser la más eficaz, fue la menos conocida.
Una técnica ignorada

La ciencia sugiere que está es una de las mejores maneras de estudiar, pero lo cierto es que no encaja en las formas habituales en las que se planifican los días de escolares.
Este tipo de estrategias de aprendizaje suelen pasarse por alto en los libros de texto de psicología educativa, por lo que los maestros no tienen una idea de cómo aplicarlos.
Pero por más que en las instituciones no se aplique este método, sí podemos aplicarlo en nuestras casas, ayudándonos de la técnica para incorporar y procesar mejor los conceptos.
Definitivamente deberíamos comenzar a prestar atención a lo que la ciencia tiene para decirnos sobre el aprendizaje más efectivo, ¿no crees? ¿Tú qué técnica de estudio utilizas?









