El portal especializado The Players Tribune se ha convertido en un inesperado animador del Mundial Rusia 2018. Se trata de un espacio donde los jugadores se animan a contar anécdotas sobre sus orígenes y nos ha hecho llegar hasta las lágrimas con las historias de vida más emocionantes del deporte.
La carta de Edinson Cavani a su «yo» de 9 años es una GRAN lección de vida

Luego de las anécdotas del belga Romelu Lukaku y del argentino Angel Di Maria, le tocó al goleador de la selección de Uruguay y del Paris Saint Germain ( PSG), Edinson Cavani. El crack uruguayo se tomó unos minutos para escribir una emotiva carta dirigida a su pequeño «yo» de 9 años, el niño que jugaba al fútbol descalzo en las calles de Salto y soñaba con algún día parecerse a Gabriel Batistuta.
La carta es de por sí emotiva, pero también esconde una valiosa lección de vida. En cierto punto Cavani valora la libertad que sentía de niño pese a todas las carencias económicas. Era una libertad que hoy la vida agitada de un futbolista de élite no le permite tener. Los hoteles caros, autos lujosos y campos de juego millonarios no son el secreto de la felicidad.

Sin más, lee la carta por ti mismo. Realmente no tiene desperdicio:
«Querido Edinson de nueve años, Le escribo estas líneas al chico que en el barrio todos llaman “Pelado”. Cuando eras un bebé no tenías demasiado pelo. Y te fue creciendo muy de a poco. Una cagada, pero no había demasiado que pudieras hacer al respecto. Así que, gracias a la creatividad de tu familia, siempre fuiste “Pelado”. Bueno, me alegra mucho contarte que en los siguientes 20 años, el fútbol va a cambiar tu vida en muchos sentidos. Algunos muy buenos, otros no tanto. Pero el fútbol te va a ayudar a deshacerte de ese sobrenombre tedioso. [...] Vives tu vida afuera, con una pelota en los pies. A la manera sudamericana. No conoces otra cosa. Y además, ¿qué hay para hacer adentro? Nada divertido. Nada interesante. No hay PlayStation. No hay televisor grande. Ni siquiera tienes para darte una ducha caliente. Tampoco hay calefacción. En invierno, tu sistema de calefacción serán cuatro frazadas. Cuando necesites darte un baño, tendrás un termo con agua que calentarás en la cocina a querosén. Es muy importante entender cómo combinar el agua fría y la caliente. Parado en la bañera, aprenderás a ser un alquimista. [...]
No te preocupes por lo que tienes en la casa. Tienes que seguir viviendo tu vida al sol, Pelado. [...] Lo que más importa en tu vida en este momento, si mal no recuerdo, es el Gol del Helado. El Gol del Helado es algo mágico. Necesito hablar con alguien del PSG sobre el Gol del Helado. Es genial. Es motivación pura. La idea fue de los organizadores del campeonato juvenil de Salto. ¿Cómo se hace para tener motivados a un montón de gurises de seis años sin importar cómo vaya el partido? Poniendo la regla de que el chico que haga el último gol del partido se lleva un helado. El resultado podía estar 8-1, pero no importaba. Era una carrera contra el tiempo. Marcar el último gol del partido. Y la sensación al escuchar al técnico que hacía sonar el silbato para marcar el final, cuando habías metido el Gol del Helado… ¡increíble! Una alegría inmensa. ¿Será de chocolate? ¿Te van a dar uno de esos de Mickey Mouse? Sea el que sea, durante todo ese día, serás el rey. [...]
¿Cuáles son tus sueños, Pelado? Ni siquiera los recuerdo con exactitud. El tiempo los transformó en recuerdos difusos. [...] ¿Tu sueño es tener mucha plata, manejar lindos autos y dormir en hoteles elegantes? Bueno, Pelado, tendrás todas esas cosas. Pero tengo que decirte algo. No necesariamente te harán feliz. Lo que tienes ahora, con 9 años de edad, es algo que ahora extraño muchísimo. No tienes una ducha caliente. No tienes un peso en el bolsillo. Ni siquiera tienes un buen pelo. Pero tienes algo más. Algo que no tiene precio. Tienes tu libertad. [...] ¿Sabes cómo es la vida ahora, a los 31 años de edad? Vas de un hotel a un bus y de ahí a un campo de entrenamiento. Después del campo de entrenamiento a un bus y a un avión. Del avión vas a otro bus. De ese bus vas a un estadio.
En muchos aspectos, estás viviendo en un sueño. Pero en muchos otros, también eres prisionero de ese sueño. No se puede ir afuera y sentir el sol. No te puedes quitar los botines y jugar en la tierra. Sucederán cosas que harán tu vida complicada. Es inevitable. [...] Cuando te pones los botines, sin importar si estás jugando en el campito de Salto, en el pasto verde de Napoli o frente a millones de personas en un Mundial… quiero recordarte las palabras de tu padre. ¿Qué te dice siempre, cada vez que vas a jugar un partido? [...] Te dice: “En el momento en que cruzas la línea de cal y entras al campo, solamente es fútbol. Nada de lo que pasa afuera de esa raya te ayudará con lo que pasa adentro. Nada más existe”.
Si escuchas esas palabras y realmente crees en el espíritu de lo que dicen, entonces, aunque la presión sea inmensa, aunque estés jugando frente a millones de personas… saldrás a la cancha y te sentirás como si estuvieras jugando descalzo. Sentirás el barro pegado en la planta de tus pies. Sentirás a tu corazón latiendo y correrás buscando la pelota, como si fuera el trofeo más grande del mundo. Como si estuvieras jugando por el helado. Sinceramente, Edi»
Puedes leer la carta de Cavani completa, pero no te vayas antes de inspirarte con otros futbolistas:






