Quizá fue la rebeldía o quizá fueron las ganas de acercarse a una cultura desconocida: probablemente haya sido una mezcla de ambas cosas la que llevó a Elisabeth Kendall a convertirse en una experta en poesía yihadista.
Kendall, una experta en poesía yihadista que tiene un gran mensaje para dejarnos

Sus ganas de aprender, de aportar y de ser diferente la llevaron a la Universidad de Oxford y, después de tantos años, nos quiere dejar un mensaje a todos.
¿Cómo llegó a ser experta en poesía yihadista?

En los 80, Naguib Mahfouz ganó el Premio Nobel de Literatura. Fue en ese momento que Kendall decidió estudiar árabe, y es que necesitaba saber por sus propios medios si ese lector era realmente merecedor de un premio tan importante (sobre todo porque no encontraba sus libros en inglés). Pero no solo por eso decidió estudiar árabe y luego especificarse en el arte, también lo hizo para molestar a sus padres, según explicó en entrevista con la BBC.
Durante sus primeros 20 años de vida laboral se dedicó a estudiar literatura árabe de la antigüedad. Pero un día comprendió que no estaba poniendo todo de sí para construir un mundo más cultural y, sobre todo, una sociedad más unida a través del arte.
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¿Por qué estudiar los poemas de Osama bin Laden?

Según explica la BBC, muchas personas consideran que su trabajo es molesto o controversial, no obstante ella cree que es muy importante analizar la forma en la que se expresan.
Por supuesto, quizá los textos que encuentre al analizar los poemas no sean los mejores, pero ese no es el objetivo. De su trabajo, se pueden destacar 3 cosas: primero, que la poesía yihadista no siempre trata de odio; segundo, que algo tan lejano como el Medio Oriente y, sobre todo, los yihadistas pueden acercarse a través del arte. Es decir, la poesía, el arte, las formas de expresarse son universales; y, por último, entender su forma de hacer poesía puede ayudar a crear poesía para ellos con otro contenido y, así, evitar la radicalización. Para Kendall « la poesía podría alejar a las personas del odio y el extremismo».
No somos tan diferentes, ellos y nosotros usamos el arte para expresarnos. Podemos terminar con la radicalización hablando el mismo idioma, es decir, haciendo arte.






