Juegos Olímpicos 2016: el costo humano y social del que pocos hablan

Los Juegos Olímpicos tienden a despertar admiración, entrega, unión entre atletas, culturas y países. Es una instancia en la que el mundo entero participa, dice presente, mira y alienta.

PUBLICIDAD

Si bien hay historias increíbles e inspiradoras que nos enseñan a no bajar los brazos y a perseguir los sueños, también hay una realidad de la que poco se habla..

Para la preparación de los Juegos Olímpicos de Río 2016, varios residentes incluyendo miles de niños, fueron víctimas de desalojos y violencia para los proyectos de construcción.

La historia detrás de los juegos

De acuerdo a un expediente realizado por académicos y organizaciones no gubernamentales en 2015, los Juegos Olímpicos han ocasionado violaciones a los derechos de los niños y otras libertades civiles.

Violencia policial, malas condiciones laborales, y desalojos son algunos de los problemas relacionados a los Juegos Olímpicos. La Coalición de activistas liderada por el Comité Popular pidió al Comité Olímpico Internacional que se preste mayor atención a los derechos humanos.

La problemática surgió el año pasado, cuando comenzaron a prepararse las construcciones para los Juegos Olímpícos, pero la realidad es que es un tema al que no se le da la prioridad que debería.

La realidad de la que deberíamos estar hablando

En el reporte realizado por las organizaciones no gubernamentales de Brasil, se asegura que al menos 4120 familias han perdido sus hogares y 2486 han sufrido amenazas de desalojo para realizar la infraestructura de los Juegos que se llevan a cabo ahora.

Como se muestra en el video, los Juegos Olímpicos de Río prometen inclusión, paz y tolerancia. ¿Pero qué pasa con esta realidad de 2015? ¿Era necesario atentar contra los derechos de los habitantes de Brasil para un Juego que promete la inclusión y el respeto?

PUBLICIDAD

En el reporte se citan estudios anteriores realizados por la Universidad de Brunel, que alegan que los riesgos de explotación de los niños, sobre todo en cuanto a mano de obra y desalojo, aumentaron durante megaeventos deportivos anteriores como el Mundial de Sudáfrica en 2010.

Y hasta investigaciones más recientes de la Universidad de Dundee y la Universidad Católica de Río de Janeiro sobre el impacto de la Copa del Mundo 2014 en los niños locales. Incluso se observó la desaparición de varios niños de la calle que fueron retirados como parte de la operación de “limpieza social” para el gran evento.

La postura del gobierno

Sin embargo, el gobierno de la ciudad de Río declara que estas acusaciones no son ciertas y que la mayoría de los desplazamientos, con la excepción de Vila Autódromo, no están relacionadas con la Copa Mundial o los Juegos Olímpicos.

Además aseguran que el 72 % de las familias reubicadas se han alejado de zonas propensas a las inundaciones y deslizamientos de tierra, y que gracias a un aumento del gasto en salud y educación, los niños están en mejores condiciones.

El secretario general de Terre des Hommes (organización internacional destinada a mejorar la calidad de vida de niños en desventaja), Ignacio Parker, declaró que es el deber del Comité Olímpico Internacional asegurarse de no causar o exacerbar los abusos de derechos humanos y de niños en Río.

Los Juegos Olímpicos de Río ya están en marcha, pero para la próxima agenda del Comité Olímpico, las denuncias de violación de derechos humanos por parte de los países que los organizan, no pueden quedar en la nada. No es un hecho aislado en Sudáfrica o uno aislado en Brasil, y no deberìa seguir ocurriendo, ¿no crees?