En lo que respecta a la ciencia, todo el tiempo nuevos descubrimientos vienen a apoyar viejas teorías o a refutarlas totalmente. Un fósil antiguo podría cambiar muchos sobre lo que sabemos de la evolución de los animales, pasando de organismos simples a más complejos. Se trata de un animal con forma de panqueque, algo aplastado, que podría ser el primer animal del mundo. Los científicos analizaron la materia grasa presente en él y publicaron su descubrimiento en la revista Science.
Gracias a la grasa descubrimos al primer animal del mundo y no era un dinosaurio

Estos animales fueron descubiertos por primera vez en los años 40 y fueron nombrados Dickinsonia. Si pudiéramos visitar los océanos de hace 558 millones de años, seguramente los encontraríamos en abundancia. Lo realmente curioso de estos animales es que mientras la mayoría de los organismos del Período Ediacárico eran microscópicos, los Dickinsonia podían medir hasta 1,4 metros.
El misterio del Dickinsonia

Su tamaño es realmente raro porque vivieron mucho tiempo antes de la Explosión Cámbrica, hace cerca de 541 millones de años cuando aparecieron los seres vivos más grandes. Los científicos se han debatido entre las ideas de que pudiera ser un animal primitivo o un organismo de una sola célula.
Lo que analizaron en la Universidad Nacional de Australia fueron moléculas de grasa llamadas Esterol. Tanto plantas, como animales, bacterias y hongos tienen este componente, pero cada uno posee uno de diferente tipo. Por eso saber más sobre el Esterol presente en Dickinsonia dice mucho sobre su historia como organismo.

Los animales generalmente tienen colesterol, mientras los hongos tienen ergosterol. Para suerte de los investigadores todavía quedan restos «momificados» de estos organismos para analizar. Descubrieron que mientras las rocas y algas cercanas tenían restos de otro esterol, el Dickinsonia tenía un 93% de colesterol, haciéndolo un animal primitivo, existente mucho antes de la explosión Cámbrica.
Quizás hay muchos otros animales que no conocemos, pero ahora ya hay un precedente para seguir analizando. Según parece, podrían haber existido animales mucho antes de la Explosión Cámbrica. Pasaron tantos años que conocer los hechos reales es una tarea difícil y que lleva muchísimo tiempo para los investigadores.
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