Filman por primera vez a una Omura, la máxima rareza entre las ballenas

Resulta sorprendente que con tantas cámaras en el mundo haya habido que esperar hasta 2015 para filmar por primera vez a un animal de tan enormes proporciones, como una ballena. Pero a las Omura no les gusta dejarse ver, que es solo una de sus varias e interesantes particularidaes.

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Una especie identificada después que se creía extinta

Imagen Wikimedia Commons

En 2003, una nueva especie ingresó a los registros de la zoología, solo que la identificación no se hizo a partir de un ejemplar vivo descubierto por un emocionado explorador, sino por el análisis de restos de cuerpos muertos, que permitió establecer que se trataba de una novedad taxonómica. La especie recibió el nombre común de Rorcual de Omura y desde entonces los zoólogos se preguntaban sí estaban frente a un organismo extinto.

Los Rorcuales son una familia de cetáceos y el Rorcual de Omura alcanza los 12 metros de adulto, a diferencia del Rorcual común, también conocido como ballena de aleta, que con 27 metros es el segundo en tamaño, solo superado por la ballena azul. Que la ballena Omura es solitaria y poco sociable lo demuestra el hecho de que hubiera que esperar hasta 2015 para avistar al primer ejemplar vivo, una enormidad considerando que estos animales andan por los mares desde hace al menos 50 millones de años.

Portan huellas para la identificación

Imagen Wikimedia Commons

En verdad, antes de la filmación ya se habían registrado varios avistamientos, pero los observadores habían cometido el imperdonable descuido de no tener a mano una cámara. Las Omura son ballenas de cuerpo alargado y tienen la característica de que su lado izquierdo es más oscuro que el derecho.

Otra de sus singularidades es que su cuerpo está cubierto de rayas de distintas tonalidades entre la aleta pectoral y el ojo derecho. Este dibujo hace las veces de una especie de enorme huella dactilar que permitiría identificar a cada ejemplar, suponiendo que hubiera la manera de verlos con más frecuencia.

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Una dama de los mares muy pudorosa

Imagen Thinkstock

El sorprendente comportamiento aislacionista de la ballena Omura se combina con una excéntrica timidez. Salen a la superficie solo por breves segundos, tienen el cuidado de esconder la cola cuando se zambullen y no muestran la cabeza y la aleta dorsal al mismo tiempo. Es como si dosificaran la exhibición de su humanidad como damas pudorosas del océano.

Hasta ahora se han identificado unos 25 individuos en los mares cercanos a Madagascar, pero con tantos requisitos para mostrarse, uno de los principales dolores de cabeza de los especialistas es cómo monitorear a un animal tan elusivo con propósitos de conservación de la especie.

Acá te dejamos un video sobre esta venturosa novedad.

Con demasiada frecuencia, asistimos a la extinción de especies que han vivido por cientos de millones de años en el planeta; acá estamos frente al inusual y afortunado caso de encontrar un animal que se creía desaparecido.