¿Cuál es el límite entre la lucha por igualdad de género y el absurdo? Esta diferencia, que a simple vista parece sencilla, puede volverse imperceptible si caemos en el radicalismo.
Feminista redacta su tesis sin la letra «o» por connotaciones machistas

¿Qué culpa tiene la «o»?
En Ciudad de México, una joven estudiante de ciencias políticas decidió dar un salto gramatical y académico para su trabajo final de grado. Decidió eliminar el uso de la letra «o» por ser una vocal asociada al género masculino.
Durante una entrevista que brindó para El Deforma dijo que el machismo está incrustado en la lengua español y que eso es un símbolo de violencia.
«Todxs y todes hablan la misma lengua, es una injusticia que se privilegie a las masculinidades».
La eliminación de una de las vocales más importantes del abecedario no ha de ser tarea fácil. Sin embargo, esta chica se las ingenió para que esa letra no apareciera dentro de su trabajo.
«Utilicé la «x» incluyente o en su defecto, la «e» igualitaria».
Asombrosamente, esta decisión fue aplaudida por distintos grupos feministas que lanzaron la consigna: «hagamxs un diccixnaria nxsxtras mismxs».
Por otra parte, el grupo de docentes de la universidad se refirió a este trabajo como un antes y un después para la RAE y para la lucha feminista contra la opresión del patriarcado.
¿Es esta nuestra prioridad?
No logro comprender cómo la eliminación de una letra del abecedario pueda liberarnos de las cadenas opresoras del machismo.
Además, si entramos en esta lógica, ¿eliminar la «o» y dejar que la «a» subsista no sería igual de injusto?
Nos están matando

La violencia de género existe, aún hay quienes se creen dueños de los cuerpos ajenos y es por eso que a diario sufrimos frente al televisor al ver que murió otra chica en manos infames.
Pero también sé que cada vez hay más personas comprometidas con esta causa, que defienden y luchan con nosotras por un mundo más justo. Se nota la conciencia que se ha generado, ya no se espera que solo seamos madres o amas de casa. En este sentido, cada vez es más frecuente ver mujeres emprendedoras que triunfan en el mundo de los negocios.
Hemos recorrido un camino largo con muchas victorias y aún falta otro tramo por recorrer, por lo que es fundamental tener bien en claro cuáles serán nuestras prioridades.
La «o» no tiene la culpa de nada, es una simple letra y adquirirá el significado que nosotros, los usuarios de la lengua, le brindemos. Así que no prescindamos de esta hermosa vocal, porque la vamos a necesitar.






