Falleció Alex, un destacado contribuyente al progreso científico
El seis de septiembre pasado falleció una herramienta viva que contribuyó de manera notable al progreso científico en biología y zoología. El loro Alex fue una mascota de la bióloga Irene Pepperberg, quien lo compró en una tienda de mascotas sin saber los progresos que el animal iba a acarrear a la comunidad científica.
A medida que fue pasando el tiempo, la científica se dio cuenta de que el loro mostraba habilidades muy impresionantes. Tras años de investigaciones que lo tuvieron como objeto, el animal comenzó a desarrollar sus cualidades, logrando asombrosos progresos. Durante treinta años estudiándolo en las universidades de Harvard y Brandeis, el loro logró desarrollar la capacidad de identificar cincuenta nombres de objetos, siete colores, y cantidades inferiores a seis.
Era evidente que este curioso animal distaba de ser un típico loro que reproducía indefinidamente la palabra papa, y se llegó a la conclusión de que Alex tenía la inteligencia de un niño de cinco años.
Estos progresos sumaron mucho al estudio de las aves, dando lugar a numerosas y significativas investigaciones dentro del área. Investigando a Alex, se llegó a la conclusión de que los loros pueden aprehender el lenguaje para utilizarlo con fines comunicativos, y no sólo para repetir sonidos.
Via | El Mundo