Esperando la paz en Colombia: jóvenes acampan frente al Congreso exigiendo nuevo acuerdo

El pueblo colombiano decidió que no estaba de acuerdo con las condiciones que establecía el pacto propuesto entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno. Esto supone el comienzo de un nuevo proceso de negociaciones y diálogo entre las partes. 

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Mientras éste se desarrolla, en Bogotá, la capital colombiana, cerca de 300 jóvenes acampan desde que se supieron los resultados del plebiscito frente al Congreso Nacional, en la Plaza de Bolívar, en reclamo de una resolución. No se irán hasta que no haya paz en Colombia.  

Manuel Llano, un joven de 28 años cuya familia tuvo que abandonar su casa a causa del conflicto armado que duró 52 años, cuenta que “cuando ganó el NO, fue doloroso. Las carpas son una muestra de nuestra frustración, de nuestra indignación”.

La esperanza es lo último que se pierde. Eso parece expresar Llano, luego de que el presidente visitara la zona de la Plaza en donde están instaladas las 100 carpas y charlara con ellos: “Él escuchó atentamente a nuestras demandas. Nos dijo que celebraremos la Navidad en paz”.

Lo que propone la oposición

Imagen Getty Images

Álvaro Uribe, ex presidente de Colombia

Antes de que se celebrara el plebiscito, los defensores del NO ya planteaban que el documento firmado por las partes no era suficiente para que los guerrilleros paguen por sus crímenes.

Las principales críticas tuvieron que ver con la impunidad (“serán amnistiables los delitos conexos con el delito político que describan conductas relacionadas con el desarrollo de la rebelión”) y la legalidad (las FARC pasarían de la clandestinidad paramilitar a ser un partido político civil; para ello recibirían USD 2 millones).  

La ex ministra de Defensa durante el gobierno de Uribe, Martha Lucía Ramírez, propuso a los negociadores que, entre los aspectos a re-dialogar con los guerrilleros, no esté incluida la posibilidad de que las FARC hagan parte del bloque constitucional. Así mismo, descartar que aquellos que hayan cometidos delitos de lesa humanidad, puedan participar de política.

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Representantes del Gobierno y voceros del NO (liderados por el ex presidente colombiano Álvaro Uribe), ya acordaron algunos puntos sobre los que se debatirá con las FARC en busca de un nuevo acuerdo.