¿Es posible usar bacterias como fuente de energía alternativa?

Las bacterias son los organismos elementales quizá con mayor éxito en la historia natural del planeta Tierra. Estos microorganismos por su alta capacidad de adaptabilidad, han estado presentes prácticamente, desde que las condiciones atmosféricas y ambientales lo han hecho posible. El desarrollo de la vida tal como la conocemos hoy día, sería inconcebible sin las bacterias. Sin embargo, su increíble capacidad de sustentarse, las han hecho objeto de observación científica por los múltiples usos en que pueden ser aprovechadas. Por ejemplo, utilizar bacterias como combustible alternativo, dadas las necesidades de nuestra civilización y el exponencial aumento de la población.

Una futura fuente de energía

La ciencia actual se encuentra haciendo investigaciones con miras a ver las bacterias como posibles productoras de hidrocarburos alternativos. Puntualmente, han encontrado la función de las bacterias tratadas en laboratorio, podrían ser eficientes en la síntesis y desarrollo del pineno, un hidrocarburo de origen vegetal que se produce en algunos árboles. 

Históricamente, han sido los hidrocarburos y sus derivados, los principales proveedores de toda la energía que se usa normalmente a nivel mundial. Como sabemos, el petróleo (literalmente del latín, petroleum, aceite de roca) y sus derivados tienen su origen en la transformación que sufren restos orgánicos de plantas y animales, sometidos a altas presiones en las profundidades de la corteza terrestre, produciendo este hidrocarburo que es el que hace posible que nuestra civilización basada en la energía, funcione de manera adecuada. Por ser este un recurso no renovable, el panorama está cambiando a favor de las bacterias.

Tecnobacterias que producen energía

Esta fuente de energía sería la alternativa ideal para combustibles de alto rendimiento como el que se usa en la industria militar y aeroespacial, llevando a desarrollar una nueva generación de motores mucho más eficientes y con menor consumo.

La inyección de las enzimas de la corteza de los árboles en las bacterias, ha conseguido en fase experimental, sextuplicar la producción de hidrocarburos. De esta manera, los investigadores consideran que el pineno, en un futuro no tan lejano, quizá en dos décadas, pueda ser el reemplazo del petróleo y sus derivados tan necesarios para la producción industrial.

Un combustible biosostenible y con un bajo impacto ambiental, además de poder producirse mucho más rápido y con mejores resultados, cambiará el futuro de la industria y la manera en que nos relacionamos con la producción de energía.

¿Cuál es tu opinión sobre el uso de bacterias para producir energía? ¿Sabes qué se puede fabricar petróleo en el laboratorio?