La policía de Nottinghamshire, el condado que rodea la ciudad de Nottingham, será el primero de Inglaterra en incluir el acoso callejero a las mujeres (avances verbales o físicos no deseados) como crimen de odio hacia ellas. Es un intento en conjunto con el Centro de Mujeres de Nottingham para detener la misoginia, proporcionar ayuda a las mujeres que lo pidan y asegurar que no sean violentadas en el espacio público.
En este condado de Inglaterra, el acoso callejero será considerado un crimen de odio

La fuerza de Nottingham define crimen de odio como "un incidente que puede o no ser una ofensa criminal, y que está motivado por odio y es cometido en detrimento de otra persona". El abuso doméstico seguirá, sin embargo, siendo tratado por otras vías. La misoginia constituye un crimen de odio según los impulsores de esta modificación porque "es violento, intimidatorio, diario, angustiante" y ejercido "simplemente porque la otra persona es mujer".
Desde gritos, nombretes, fotografías o contacto físico, son formas de ejercer poder y recordarle al otro de que es vulnerable. Además de indeseado, te afecta negativamente. La policía de Nottingham viene recibiendo entrenamiento a este respecto hace varios meses y ya han investigado anteriormente a lugares (empresas, en un caso en particular) que silbaban desde la ventana a quienes pasaban.
El acoso callejero hace sentir a las mujeres menos seguras
Y es degradante y desagradable para todos quienes lo presenciamos.
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