El coronavirus se puede adherir a los zapatos, te decimos qué debes hacer

Desde la aparición del coronavirus (COVID-19) a principios de 2020 en la región china de Wuhan, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no deja de emitir las medidas preventivas para descartar el contagio y la propagación de la enfermedad.

Lavar las manos con agua y jabón por 20 segundos es una de las recomendaciones más importantes, además de no tocarse la cara, limpiar las superficies del hogar, objetos de uso diario, etc.

Ante dichas prácticas, en redes sociales ronda una duda frecuente: ¿es necesario quitarse los zapatos antes de entrar a casa para mitigar el posible contagio?

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No salir a las calles es lo que recomiendan los expertos, pero desde luego esa medida es imposible de acatar en muchos sectores: millones de personas viven al día y deben, por lo menos, salir a trabajar. Por si fuera poco, están quienes requieren de salir para comprar alimentos de la canasta básica.

Ahora bien, el hecho de no entrar a casa con los zapatos usados en la calle, puede servir de mucho. Especialistas del Kind Heatlh Group mencionan que hay evidencia de que el virus puede vivir en las superficies de dos a tres días según los materiales, así que no es descabellado pensar que el COVID-19 puede alojarse en los zapatos.

Ante ello, la prestigiosa doctora Georgine Nanos añadió que los zapatos pueden ser una fuente potencial de contaminación, especialmente si se usan en áreas con mucha gente (como el transporte público o supermercados).

Nanos detalla en varios de sus testimonios, la importancia de no subestimar el calzado:

quote: El coronavirus puede vivir en superficies hasta por 12 horas, potencialmente más (...) Y esto definitivamente incluye zapatos, desinfectarlos como cualquier otro objeto de uso rutinario es indispensable.

El comportamiento del COVID-19 todavía está envuelto en misterios. Para prevenir un contagio, lo recomendable es limpiar los zapatos utilizados con la ayuda de un cepillo, agua y jabón. Anterior a ello, hay que retirarlos en la entrada para no esparcir agentes contaminantes por la casa.

Por cuestiones de tiempo, lo mejor es designar un solo par de zapatos para salir de casa, dos a lo mucho para no contaminar el resto del calzado o superficies internas.

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