T.J. Miller, actor principalmente conocido por su papel en la serie de HBO Silicon Valley y por su participación en el éxito taquillero Deadpool, forma parte de esa gran mayoría de estrellas de Hollywood que han manifestado abiertamente su oposición a Donald Trump.
El actor T.J. Miller se peleó discutiendo sobre Donald Trump y fue arrestado

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Pero al menos en el caso de Miller, esta posición política no parece ser tomada a la ligera, a juzgar por el escándalo más reciente protagonizado por el actor. Según reportó el sitio TMZ, Miller fue recogido el viernes de madrugada por un coche de la compañía Uber, en las afueras de la fiesta de El hombre del año de la revista GQ.
Durante el viaje hacia su hogar, el conductor y el actor se involucraron en una discusión en torno a Donald Trump.
Presumiblemente, el conductor defendió o justificó algunas de las conductas y propuestas del presidente electo de los Estados Unidos.

No es algo infrecuente. Seguramente todos pasamos alguna vez por la situación de tener que escuchar opiniones cuestionables o aberrantes —o, en todo caso, opuestas a las propias— defendidas con vehemencia por un trabajador de algún servicio público con el que nos vemos momentáneamente obligados a interactuar.
No obstante, la reacción más habitual es asentir en silencio o relativizar moderada y tímidamente algunos de sus exabruptos. No es el caso de T.J. Miller.
Según estos reportes, al llegar a destino, el actor le propinó una bofetada en la cara al trabajador, ofuscado por sus opiniones sobre Trump.
A continuación, el hombre golpeado contactó a las autoridades y denunció las acciones de T.J. Miller, que fue arrestado bajo sospecha de agresión.
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El conductor no tenía ninguna herida visible, pero Miller reconoció más tarde su agresión y fue liberado sin tener que pagar fianza, cuyo monto estaba fijado en $20.000 dólares. Este curioso altercado no hace más que consolidar la fama de excéntrico y un poco loco que T.J. Miller se ha ganado.
De hecho, antes de ir hacia su casa, Miller se encontraba en una fiesta en la que se lo pudo ver con una misteriosa herida en su oreja y todo su traje manchado de sangre.
Así, se tomó las típicas fotografías de alfombra roja junto a su pareja, la actriz Kate Gorney.

Algunos sugieren que todo esto no es más que un stunt publicitario para la extravagante comedia navideña Office Christmas Party, que protagoniza junto a Jason Bateman, Jennifer Aniston y Olivia Munn y se estrenó en estos días.
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